Ganó el aguacero mientras que Puntarenas FC y Herediano están empatando 1-1 en una historia pendiente de resolverse.
Lo más sensato era que el juego se reanudara este lunes, a partir de las 3 p. m., siempre en el Estadio Lito Pérez. Sin embargo, la posición de los florenses fue esperar un tiempo prudencial, de media hora.
¿Las ganas de jugar o la integridad de los jugadores? La pregunta se contesta sola. Sin embargo, había que seguir lo que dicta el reglamento.
Se cumplió la media hora estipulada, los árbitros salieron a inspeccionar la cancha y era claro que ahí no se podía jugar.
Pero a continuación contamos parte de lo que pasó en el primer tiempo de un partido en el que anotaron Gerson Torres y Jaikel Medina.
Ni los rayos, ni el aguacero, ni la cancha en unas condiciones que no eran las mejores producto de lo anterior impidieron que Elías Aguilar tomara el balón y empezara a generar fútbol, junto a Gerson Torres y Luis Ronaldo Araya.
Herediano era más que el Puerto en esa Olla Mágica que por momentos mostraba ciertos charcos. En ese campo resentido por tanta agua daba la impresión de que los florenses estaban muy cerca de plasmar en el marcador lo que hacían en la cancha.
Juan Miguel Basulto dio un aviso al peinar el balón, luego de un tiro de esquina de Elías Aguilar. También probaron suerte Haxzel Quirós y Darryl Araya.
Después de varios intentos más, el mismo equipo rojiamarillo sentía que ya era justo y necesario que cayera el gol.
Ocurrió con un pase que filtró Elías Aguilar en un contraataque hacia un Gerson Torres que se lució, se perfiló y con mucha técnica sacó un remate potente y letal de media distancia. Fue una verdadera joya de gol.
Pero es que tomar ventaja en un partido de control total a veces resulta contraproducente. Las condiciones no eran las mejores para que Herediano buscara jugar bonito.
Claramente era uno de esos partidos en los que vale más el resultado. Queda la impresión de que al verse arriba en el marcador, Herediano bajó un tanto las revoluciones de un partido que dominaba a placer.
Eso se mezcló con un Puntarenas que quería hacer algo más allá de estar muy bien ordenado en defensa. Los chuchequeros se esforzaban en nivelar las acciones.
Keyder Bernard festejaba, pero la acción se dio en fuera de juego y se invalidó. No fue gol, pero esa jugada sirvió para que los hombres de Diego Vásquez cayeran en cuenta de que sí podían literalmente sacar agua del bote.
Lo hicieron mediante la táctica fija. Luis Miguel Franco cobró un tiro libre. César Romero tuvo la gran virtud de cabecear esa pelota y darle dirección hacia donde estaba Jaikel Medina.
Ese defensa que en acciones de balón parado siempre sube para buscar algo. Esta vez no fue la excepción y se encontraba en el lugar indicado para sacar ese remate con el que venció a Aarón Cruz, aprovechando también un error en la marca por parte del Team.
Con el 1-1 en la pizarra, los protagonistas se marcharon a camerinos para el descanso. Justo en ese momento se desató un aguacero que muy rápido convirtió la gramilla del Estadio Lito Pérez en una piscina.
La primera determinación fue que se esperaría media hora, luego se tomó la decisión final de que todo continuará este lunes.