San Rafael de Alajuela
Óscar Ramírez insiste que hoy está al mando de la Selección porque Dios así lo quiso, al encaminar todo para que el 18 de agosto fuera presentado con la camiseta de la Tricolor .
El Macho repasa los momentos vividos en los últimos cuatro meses, cuando justamente perdió la final del Verano 2015 por penales en el estadio Eladio Rosabal Cordero.
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Keyner Brown empató (2-2) el juego ante la Liga en el último suspiro del tiempo extra. En penales, los florenses campeonizaron. | LUIS NAVARRO (Luis Navarro)
Ese resultado, quizás, fue de lo primero que le limpió el camino. Ramírez cree que de haber logrado el título, hoy estaría en el banquillo de los manudos.
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“Todavía creo y sostengo que estoy acá porque estaba para mí. Para empezar, si hubiéramos salido campeones, estaría en la Liga. Don Raúl Pinto probablemente me hubiera convencido de seguir”, le dijo el Macho a La Nación ayer en plena despedida tras entrevistarlo durante 15 minutos en el Proyecto Gol, en Alajuela.
Todavía no cree en la manera en que el cetro se le escurrió de las manos, hoy hace cuatro meses. Incluso, le da vueltas a la forma en que entró el gol de Keyner Brown para alargar a los penales, en los que estaba seguro, iban a tropezar.
“Se lo comenté a don Raúl (Pinto) y don Henry (Zamora), si nos vamos a penales no auguro un buen resultado; el día antes los repasamos y no nos fue tan bien”, señaló el timonel.
Marco Vásquez, vocero y dirigente rojinegro, señaló que no duda de lo que comenta Ramírez.
"Es el técnico más ganador de la institución. Como dicen: técnico que gana repite, es probable que de salir campeones esa noche, Óscar estuviera en el equipo. También hay que recalcar que de haber seguido y la oportunidad de llegar a la Selección Nacional se presenta, la dirigencia no le pone trabas, es una meta que él logró con trabajo", dijo Vásquez.
Hoy habla más tranquilo, con más soltura. El día a día le trae menos presiones que cuando estaba en la Liga, aunque sí una responsabilidad mucho mayor.
“Tratar de llevar a un país a un mundial no es jugando”, dice.
Ramírez hoy cumple un sueño de todo entrenador. Una meta que nunca buscó.
En lugar de ofrecerse a la Federación Costarricense de Fútbol, prefirió ganarse las cosas con trabajo, convencer con números y resultados, tanto en la Primera División como en la Liga de Campeones de la Concacaf.
Tras la salida del colombiano Jorge Luis Pinto, lo invitaron para que dejará su hoja de vida en el Proyecto Gol, sugerencia que rechazó sin pensar.
La salida de la forma más inesperada de Paulo Wanchope le puso su sueño cara a cara y en el panorama que él quería: tomar la Selección mayor sin él mover nada. A su estilo, leal y transparente, solo levantó el teléfono, escuchó la propuesta y dijo sí.