Keylor Navas entra sonriente, muestra su lado más paternal y acompaña a dos niños de cinco años y tres más grandes a un sillón en el Hotel AC de Escazú. Él da las instrucciones, mientras su esposa, Andrea Salas, también con una sonrisa de oreja a oreja, cuida que ningún detalle quede atrás.
Justo antes de que se iniciara la conferencia de prensa en la que el exportero del Real Madrid y el PSG anunciaría la primera carrera de motocross, tomó 30 segundos para saludar a cada periodista que llegó sin la tensión de muchas veces en otros escenarios, con otros retos encima.
Al portero se le ve un semblante relajado, tranquilo y muy sonriente. Su círculo cercano asegura que este descanso, obligado, que tuvo en su carrera futbolística le ha caído muy bien, sobre todo porque le permitió “desintoxicar” de alguna manera tanta presión que conlleva estar en la élite del fútbol mundial.
Desde hace 10 años, el guardameta y su familia no pasaban cumpleaños, actividades familiares, paseos ni torneos de los deportes que practican sus hijos como lo han hecho en el segundo semestre de 2024, después de que el jugador terminara contrato con el París Saint-Germain y no lograra llegar a un acuerdo en el último mercado de piernas, lo que le dio una pausa en su carrera.
En la conferencia del primer evento de su nueva arista empresarial, KN1, el cuidapalos bromeó como pocas veces lo había hecho frente a la prensa, e incluso asumió el rol de director de la conferencia, administrando las preguntas, asistiendo a los pilotos invitados a su carrera e interactuando con los medios presentes, como no lo hacía en Costa Rica desde 2010, cuando un futbolista 14 años más joven dejaba el Saprissa para volar a España, precisamente al Albacete.
Keylor se mostró cómodo frente a los micrófonos, de hecho, hasta posó para las cámaras una y otra vez y con orgullo contó cómo él y su familia querían ser ese impulso que la disciplina de los ‘caballos mecánicos’ necesitaba.
“Esto que estoy haciendo es como cuando a mí me regalaron mis primeros guantes y mis primeros tacos”, confesó.
El arquero hizo que un rato, que podría haber sido incómodo para sus invitados, los pilotos internacionales, quienes no estaban acostumbrados a tanta prensa, fuera muy ameno.
“Les voy a servir agua para que calmen los nervios. Ustedes los ven todos calladitos, pero cuando se suben a las motos, ¡ahí sí es cierto!”, expresó Keylor para provocar las risas en el salón.
Tuvo algunos momentos divertidos con la prensa, como cuando iba a finalizar la conferencia y Andrea Salas, su esposa, le recordó que debía dar la información de cómo se compraban las entradas para el evento.
“Ven que yo soy del equipo que hace caso: ‘Acá solo queda decir: ‘sí, señora’”, mencionó mientras el salón reía.
En medio de un ambiente alegre, se contó un secreto que le sacó una sonrisa al arquero y un gesto de sorpresa: ¡Qué torta!
Keylor Navas ya anda en moto también, pero de inmediato aclaró: “Lo que yo hago es dar una vueltita, rodo una pista, ando relajado, disfruto el panorama, pero soy consciente de lo que quiero, que es seguir jugando fútbol. Cuando me retire, si Dios lo permite, ahí sí intentaré andar más rápido. Por lo menos quiero pegarme un vuelito”, acotó.
Scott Vargas, amigo de Navas y piloto profesional, aseguró que el guardián del arco tiene potencial sobre la moto, porque es ágil, flexible y tiene fuerza para controlarla ante cualquier movimiento. ¿En un futuro competirá? Solo el tiempo lo dirá.
Al finalizar la conferencia, el guardavallas sacó tiempo para tomarse fotos con pequeños y grandes, y hasta aconsejó a los hijos del periodista Mynor Solano sobre lo que tenían que hacer para ser fuertes y deportistas.
“Coman muchas frutas y verduras, esto es lo que hay que hacer”, les dijo mientras sonreía agachado para estar a la altura de los dos.
Durante 30 minutos, Keylor atendió al público general, repartiendo sonrisas para las fotografías y dejando autógrafos en las camisas que le pusieron al frente.
Aunque él dijo que antes sonreía, pero no lo veían, lo cierto es que el portero luce tan cómodo y feliz en este periodo de vacaciones obligadas que volvió a mostrar su lado más humano, como tal vez hace mucho Costa Rica no lo veía: el Keylor ameno, amigable, con esa esencia de tico que la misma distancia de su tierra natal le había escondido.
La idea del Halcón es, en enero, volver al fútbol, pero de momento se le nota fascinado con su vida en el país. “Por dicha me volvieron a ver sonreír, como dijeron por ahí”, cerró el deportista más importante de la historia de Costa Rica.
De fútbol se habló poco, pero Keylor sí contó que verá la final entre Herediano y Saprissa. ¿Un resultado? ‘Que gane Saprissa, por cualquier marcador, la ventaja, así sea de un gol, siempre es importante”, guiñó a la afición que lo vio nacer y que en el mediano plazo podría verlo defendiendo nuevamente su arco. El coqueteo es evidente.
El amor de Keylor Navas por el motocross
Keylor Navas, en su natal Pedregoso, era un niño menor de 12 años que, al escuchar el rugir de las motocicletas en el cafetal junto a su casa, se escapaba de la mirada de su madre, doña Sandra Gamboa, para ir a ver a las personas de su mismo pueblo dominar los llamados “caballos mecánicos”. Lo hacía en aquella pista “clandestina” junto a su hogar, sin imaginar que 30 años después estaría liderando la evolución de este deporte.
Este sábado y domingo, el guardameta llevará a cabo la primera edición de su evento: la Carrera de Motocross KN1, que se celebrará este sábado 14 y domingo 15 de diciembre, en San Mateo de Alajuela, en la pista La Torre, a partir de las 9 a. m.. Las entradas están disponibles a través de Eticket.
La competencia será un evento de nivel latinoamericano, ya que contará con los mejores exponentes de la región: Lukas Dunka (Brasil), Germán Bratshi (Argentina), Carlos Badiali (Venezuela), Scott Vargas (Costa Rica), entre otros.
Este es el primer evento organizado por KN1 Sports, una empresa ideada por Keylor para promover otros deportes, basada en una pasión que él había tenido guardada: el motocross.
La pasión del Halcón es tan fuerte que ya ha anunciado su equipo para el próximo campeonato nacional, que se llamará KN1 y tendrá a Scott Vargas como entrenador.
El jugador confesó que para su cumpleaños, el 15 de diciembre, lo único que pidió fue una carrera de motocross, por lo que está “cumpliendo un sueño” al lograr organizarla.
“Siempre soñé con andar en moto, Dios me dio otro don con el que me fue bien, pero lo que hacen estos pilotos es admirable”, dijo Navas.
Por su parte, pilotos como Dunka y Badiali se mostraron agradecidos por la oportunidad que les brinda Keylor.
“Yo nunca he visto a un futbolista venezolano hacer lo que Keylor está haciendo por el motocross, y esto es por el motocross de Costa Rica y el latinoamericano”, aseguró Badiali.