
César Alpízar tiene 36 años; a su edad, hay futbolistas que siguen activos. Sin embargo, él, pese a su corta trayectoria de vida, tiene 10 años en los banquillos del fútbol nacional, sobre todo en la Liga de Ascenso y Linafa.
Alpízar es el encargado de comandar el barco del Puntarenas F.C., plantel que está siendo la revelación en el inicio del 2025, ya que de nueve puntos ha logrado ganar siete y es líder del campeonato, además de haber salido del último puesto de la tabla general.
Estar al mando del PFC es su primera oportunidad como técnico en la máxima categoría, ya que anteriormente dirigió proyectos de divisiones inferiores o formó parte como asistente. No obstante, pese al corto recorrido, ha logrado impactar de entrada, ya que la afición del Puerto se ilusiona con el liderato, la clasificación y hasta sueña con ganarle la final del Torneo de Copa a Alajuelense.
En Puntarenas, ven todos esos factores desde la óptica de la afición; ellos prefieren ir juego a juego, pero no esconden que se está haciendo un buen trabajo, y eso lo reconocen.
“El factor número uno por el que César es nuestro entrenador es extra futbolístico, porque es la humildad de él. Es una persona que escucha. Él habla mucho conmigo, eso a mí me encanta”, explicó Héctor Trejos, presidente puntarenense.
LEA MÁS: Puntarenas confía en desbordarse de ilusión en su ‘todo o nada’ por seguir en Primera División
Trejos recordó que cuando acordaron darle la oportunidad a César, fue una decisión de la administración, quienes comenzaron a notar que el proceso que él había llevado lo tenía listo para este reto.
“César siempre ha estado a nivel de primer equipo, estuvo de asistente de Horacio Esquivel, después siguió siendo asistente, yo me lo llevé para Jacó, estuvimos haciendo trabajo con Jacó, pero le salió la opción del PFC y él llegó antes que yo,” resumió Trejos.
El entrenador no cambia de discurso, y aunque acepta que en ocasiones la ilusión lo invade, prefiere que sea el trabajo el que hable domingo a domingo.
“De momento, con responsabilidad, nos está yendo bien, pero no es momento para celebrar. El equipo tiene el objetivo de hacer las cosas bien, hemos trabajado para hacer las cosas bien... Yo soy del pensar que si se trabaja de forma integral, todo saldrá bien... Ahora hay una ilusión de competir, de clasificar, pero seguimos trabajando con humildad, sin sentirnos más que nadie y sumando partido a partido,” acotó.
César está muy preparado a nivel profesional. Nativo de Esparza, el entrenador ya tiene una licenciatura en Psicología, también una licenciatura en Administración de Empresas con énfasis en Recursos Humanos y su carrera como entrenador.
Sobre los retos que se avecinan, el timonel es claro en que evalúa cada semana lo que pueda venir. Prefiere no pensar en el futuro a mediano y largo plazo.
Por su parte, Héctor Trejos detalló: “Por esas cosas de la vida me salieron los recuerdos cuando Puntarenas F.C. venció al otro monarca de Centroamérica en penales hace un tiempo. Nosotros, en aquel momento, éramos David y ellos Goliat. Yo prefiero seguir siendo David, pero dije que íbamos a estar entre los cinco primeros, dijeron que solo humo tiraba... Aunque vea dónde estamos. Algo que le dijimos a César es que la casa se respetaba, y hasta el momento lo hemos cumplido.”
Un hombre de 36 años tiene a Puntarenas desbordada de ilusión, pero él no se cree más que nadie, de hecho ni siquiera se cree todavía ser el líder del torneo.