Cuando Kevin Kuranyi debute en el Mundial 2006 con Alemania en el partido inaugural contra Costa Rica, el 9 de junio en Múnich, llevará la bandera de Panamá debajo de su uniforme.
De esta forma Kuranyi quiere rendirle tributo al país donde nació su madre y donde jugó futbol durante su adolescencia como central del Serrano FC y el Sporting San Miguelito.
Kevin, primero gran goleador del Stuttgart y hoy figura del Schalke 04, tiene tres pasaportes. Además de su madre canalera, su padre es alemán y él nació en Río de Janeiro, Brasil.
Pero no es el único caso de doble nacionalidad en el equipo alemán que jugará el Mundial. Están también tres polacos: el artillero Miroslav Klose, el volante de llegada Lukas Podolski y el defensor Lukas Sinkiewicz.
Su director técnico, Jurgen Klinsman, le tiene confianza a otros "extranjeros" como el esloveno Fredi Bobic, el ghanés Gerald Asamoah y el "africano Patrick Owomoyela, hijo de una alemana y un nigeriano.
Entre los muchos casos en Alemania 2006 están los brasileños naturalizados tunecinos, el zaguero José Clayton y el goleador Francileudo dos Santos.
En Holanda aún son muy valiosos los veteranos mediocampistas de origen surinamés: Edgar Davids y Clarence Seedorf.
Japón exhibirá al brasileño Alessandro Santos, en tanto que México lo hará con el volante brasileño Zinha y el goleador argentino Guillermo Franco.