Gracias a la experiencia y buen ojo de Edwin Lobo, la marca Honda estrenó ayer un equipo que promete muchos éxitos.
Alex Víquez y Alejandro Rojas, el primero piloto de 125 y 250 cc, y el otro solo de 125 cc, son las dos cartas fuertes que tiene la escudería, conformada hace apenas una temporada.
"Aléx corre en las dos porque tiene más tiempo con nosotros, mientras que a Alejandro aún le falta un poco", expresó Lobo.
De acuerdo con Lobo, la idea fue juntar a los dos corredores con mayor talento y, por ende, de más proyección del país.
"No me cabe duda que ellos son actualmente los mejores. Hemos trabajado muy fuerte para que su nivel se mantenga en crecimiento", agregó.
El jefe del equipo Honda es padre de Ernesto Lobito Fonseca, quien corre hace seis años en el supercross estadounidense.
Además, entrena a pilotos de Puerto Rico, México, Guatemala y Estados Unidos.
Según indicó, para setiembre próximo espera llevar a Víquez a competir al profesionalismo estadounidense, donde no duda que podría destacar.
"Alejandro lo hará después, pero nuestra intención es ubicarlos allá. Por lo pronto queremos ser campeones aquí".