EscucharSan Pedro Sula (Honduras). "Como fue ante México, el tema de Honduras ya pasó. No hay nada que hablar y ahora solo pensamos en Haití, un equipo que tiene posibilidades reales de ir al Mundial".
Juan Diego Quesada, técnico de la Selección Infantil (Sub-17), trazó de esta forma el día siguiente del juego ante los catrachos y las horas previas del partido de esta tarde (3 p. m. en el Francisco Morazán) ante los haitianos.
De ganar, los ticos amarrarían el último boleto disponible para la Concacaf para el Campeonato del Mundo, a celebrarse en Trinidad y Tobago en setiembre de este año.
Los ticos llegan a este choque con cuatro puntos; los caribeños cuentan con tres. México tiene tres unidades y Honduras con solo una está fuera del baile.
Para este juego está confirmada la participación del portero Pablo Quesada, quien en el partido contra los catrachos sufrió una cortadura en el párpado derecho que ameritó cuatro puntadas.
Costa Rica depende de sí misma para llegar al Mundial: el triunfo aseguraría el boleto sin depender del resultado que obtengan a segunda hora aztecas y catrachos.
El viernes pasado los haitianos fueron vapuleados, 7 a 0, por los mexicanos, luego de dar el primer golpe ante Honduras, a la que le ganaron 1 a 2.
Cabeza fría
Quesada vuelca sus energías en hacerles ver a sus muchachos que si Haití logra un triunfo hoy y Honduras derrota a México, los isleños irán a Trinidad.
"Hay que recordarles que no son fáciles, que hay que ganarles y que debemos subir peldaño a peldaño para llegar al Mundial", sostuvo.
Agregó que como grupo "solo tenemos una meta: superar a Haití. Lo que les pasó contra México son circunstancias del deporte y podemos encontrar miles de razones para explicar ese 7 a 0".
Esa actitud que Juan Diego busca inculcar en sus muchachos quedan sintetizadas en las palabras del volante Pablo Jiménez, las cuales se convirtieron en lema del grupo.
Para el mediocampista, "la suposición se convierte en el inicio del fracaso".
Gabriel Badilla, capitán de la Tricolor, lo comentó de esta manera: "Los agrandados siempre pierden y nosotros no queremos perder".
Germán Retana quien colabora como facilitador para desarrollar la motivación de grupo hace énfasis en ese aspecto.
"Tenemos que respetar a Haití para no arriesgar el trabajo de 11 meses. Debemos fortalecer la cohesión de grupo, porque ante un reto difícil la respuesta debe ser mayor integración".
La labor del cuerpo técnico en estas instancias procura traerlos "a tierra", para que no piensen que todo está hecho.
"Hay que buscar el equilibrio y el respeto, no mirar a nadie por encima del hombro. También hay que recordar que aquí estamos formando hombres de bien, más allá del aspecto competitivo. Si Dios quiere, se darán las cosas e iremos al Mundial", aseveró el estratega de la Tricolor.
