Después de ocho victorias consecutivas, el París SG concedió su primera derrota de la temporada en Ligue 1, este domingo frente al Rennes (2-0), debido a la falta de acierto del trío Lionel Messi-Neymar-Kylian Mbappé.
El arquero titular en este compromiso fue el italiano Gianluigi Donnarumma, de esta forma el costarricense Keylor Navas vivió sus primeros dos juegos de forma consecutiva sin ver acción, porque no estuvo en el campo a mitad de semana por la Liga de Campeones y tampoco ahora en el torneo francés.
Cinco días después de ganar en Liga de Campeones al Manchester City (2 a 0), el líder del campeonato francés sufrió su primer revés liguero cuando menos lo esperaba, tras los goles de Gaetan Laborde justo antes del descanso y Flavien Tait nada más volver de vestuarios.
El entrenador Mauricio Pochettino alineó a su once tipo esperando prolongar la buena dinámica de un equipo que empieza a encontrarse.
Pero el PSG se olvidó de lo esencial en Bretaña (oeste de Francia): marcar.
Aunque fueron dominadores, especialmente en la primera parte, los parisinos multiplicaron los errores frente al arquero Alfred Gomis, uno de los mejores de su equipo este domingo.
Cuando Mbappé engañó al senegalés, su gol fue anulado por el VAR por un fuera de juego en el comienzo de la acción. Habría sido el 2-1 y podría haber cambiado el desenlace del encuentro.
La decisión del VAR fue celebrada como un gol por el público que acudió al Roazhon Park, que en ese momento sintió que el viento soplaba a favor de su equipo, como en agosto de 2019 (triunfo por 2-1) o en mayo de 2021 (1-1).
Minutos antes, el Rennes había construido una importante ventaja con dos goles estratégicos: justo antes y después del descanso.
El primer tanto fue obra de Laborde, quien superó en velocidad al defensa Nuno Mendes para cazar el centro de Kamaldeen Sulemana.
El máximo goleador de la Ligue 1 (6 dianas) inició el 2-0 con un desborde por el costado diestro. Su pase atrás encontró a Tait, quien coló el balón en las redes apenas 18 segundos después del pitido que daba comienzo a la segunda mitad.
Esta acción habla tan bien del oportunismo de los bretones como deja dudas sobre la concentración de los parisinos.
La derrota, la primera fuera de casa en Ligue 1 desde la sufrida ante el Lorient (3-2) el 31 de enero, no pone en riesgo el dominio en la tabla del PSG, quien mantiene seis puntos de ventaja sobre su primer perseguidor, el sorprendente Lens (2º).
Pero llega en un mal momento, justo antes de dos semanas de parón internacional, sin la opción de un nuevo partido que borre este tropiezo.
Luego de 15 partidos ligueros consecutivos marcando al menos un gol, el PSG se quedó seco.