Jimmy Marín ya está disponible para ser elegible en la Selección Nacional, ante esto, en el último día del mercado de transferencias de Israel buscó una opción que le permitiera tener la regularidad deseada para así poder integrar el combinado patrio Mayor y el Sub- 23, que peleará por un lugar en los próximos Juegos Olímpicos.
El día fue una completa locura para el nacional, debido a que por la tarde israelí se dirigía para un equipo; no obstante, en la noche tuvo que cambiar de colores. El Hapoel Ber Sheeva aceptó la solicitud del nacional para salir cedido y los interesados no se hicieron esperar.
En principio Jimmy jugaría en el Hapoel Raanana, escuadra con la que se había llegado a un acuerdo, pero por circunstancias ajenas al jugador, el trato se rompió y el tico tuvo que comenzar viaje al Football Club Ashdod, quien al final se lo dejó.
“Después de tener todo arreglado para pasar al Raanana, al final del día hubo un cambio debido a situaciones privadas de la negociación; esto impidió mi llegada. Al tener otras opciones decidimos siempre ejercer el préstamo, pero al Ashdod FC, donde estaré los próximos cuatro meses”, afirmó el futbolista.
Jimmy, con el Beer Sheva, vivía su primer año, después de que llegó a esta institución a inicios de temporada, empero apenas acumula 611 minutos de los 1.980 posibles.
Según contó el exherediano, en el último mes sufrió una dolencia muscular que le provocó perder terreno en la planilla estelar, por lo que era mejor tomar ritmo en otra institución.
"El traspaso se da con el claro objetivo de sumar 90 minutos semana semana, para así continuar con éxito mi adaptación deportiva a un fútbol muy dinámico y físico. Hace unas semanas sufrí una dolencia muscular y en el momento competitivo que vive el Beer Sheva sería más complicado retomar los minutos de juego"; añadió.
La razón que más pesó para el oriundo de Tibás es que ahora vuelve a estar a completa disposición de Rónald González si el estratega de la Mayor así lo requiere, como también el proceso Sub-23, liderado por Douglas Sequeira.
"Quiero estar al máximo nivel no solo para seguir creciendo, sino también para estar a disposición de los distintos procesos de Selección Nacional que vienen"; finalizó.
La última vez que Marín estuvo en una Selección Nacional fue en el campamento previo a la última Copa Oro, cuando antes de que iniciara el torneo el jugador decidió abandonar la concentración para firmar en Israel.
En aquel momento, Gustavo Matosas, técnico de la Sele en ese momento, reportó la situación al Comisión Disciplinaria de la Fedefútbol que castigó al jugador con seis meses sin convocatorias.
Jimmy adujó que no podía dejar pasar el contrato de su vida, y que solicitó permiso para ir a firmar y regresar, pero no se lo concedieron.
“Me llamó Diego Brenes y me dijo que no había permiso. Entonces, me reuní en familia y tomé la decisión de hablar con Matosas para informarle que sí necesitaba ir. Nosotros llegamos al acuerdo de comunicarle que estaba dispuesto a ir y regresar (para la segunda fecha de la Copa Oro), pero no se dio el permiso y el club me está esperando. Yo ahora tengo que ir allá porque la carrera del futbolista es muy corta y tengo claro cuál es el paso que debo dar”, dijo en aquella ocasión.
Ahora Jimmy buscó los minutos para volver a la Sele.
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