Jonathan Moya acepta que es humano, que estaba lleno de ilusión por volver a ponerse la camiseta de la Selección Nacional, pero al final digiere con calma el quedarse fuera de los definitorios encuentros ante Canadá y Honduras.
Moya habló desde Corea del Sur con La Nación y confesó que el día en que se anunciaron los llamados para los cotejos de noviembre fue extraño para él, sobre todo porque tenía todo listo para desplazarse a territorio nacional; empero, al final el viaje no se dio.
Jonathan no cuestiona su ausencia y por el contrario es claro en asegurar que las decisiones ‘son parte del fútbol’ y en esta ocasión a él le toca esperar por otra oportunidad.
“Obviamente triste, porque quería ayudar al equipo, siempre tenía en mente viajar al punto que tenía todo listo: los papeles, todo... Yo ya me había comunicado con personas de la Federación para la visa, teníamos los boletos listos y demás, yo ese día tenía partido y luego comenzaba el viaje hasta Costa Rica, pero me levanté ese día en la mañana y no vi el nombre en la convocatoria”, dijo.
“Yo me puse triste, pero no quería que eso me afectara porque ese día teníamos un partido muy importante por delante, sabía que debía hacer las cosas bien. Al final, yo hasta anoté, aunque no clasificamos a las rondas finales para pelear al ascenso”, agregó.
Moya se refiere al duelo que tuvo el Anyang el sábado pasado en el que perdieron 3 a 1.
“Sí me sorprendió porque tenía todo listo, tenía toda la logística y demás, pero bueno... Yo viajé a Seúl a tramitar la visa entonces tenía todo en regla, Nada más me dormí para despertarme, jugar y luego viajar, al final es una decisión que respeto totalmente, tal vez no era el momento de llamarme”, profundizó.
El artillero logró en el fútbol de Corea del Sur 14 celebraciones; no obstante, con Costa Rica todavía no ha podido marcar en la eliminatoria. Moya acumula 296 minutos disputados.
“Yo, obviamente, como ya venía siendo recurrente en las convocatorias pues pensé que podía estar y adelanté varios trámites... Sé que los que debían hablar de mí eran los goles y estaban costando, pero sabía que hacía un trabajo de sacrificio”, recalcó.
LEA MÁS: Del archivo: La esperanza del ataque tico llega con un viaje de 15.000 km en al menos 21 horas
El delantero añadió que en el grupo de jugadores son conscientes que en la actualidad se pasa un momento complejo.
De hecho, aunque no integra la nómina para los cotejos ante Canadá y Honduras, el exgoleador de Alajuelense declaró que en el plantel ven estos dos encuentros como la posibilidad de alcanzar ese escalón que ha hecho falta para meterse de lleno en la lucha por un cupo directo a Catar 2022.
“Nosotros para estos partidos somos conscientes de que debemos ganar los puntos; esta eliminatoria ha sido muy fuerte... Hemos perdido puntos importantes en casa y también hemos sumado afuera... Estos juegos los vemos con mucha confianza y responsabilidad, sabemos que pese a los no tan buenos resultados todavía tenemos muchas chances de ir al Mundial y estos partidos se ven como ese escalón o impulso gigante que necesitamos para meternos. Sé que mis compañeros están centrados en lograr un gran resultado en Canadá, que nos permitirá llegar con más confianza al duelo con Honduras”, evaluó.
Respecto a su gran temporada en Corea, el ariete explicó que su proceso de adaptación fue muy sencillo, sobre todo porque se mentalizó en que esta era su última oportunidad para conseguir ‘pegarla’ internacionalmente.
Moya estuvo previamente en el fútbol de Ucrania y España.
“Sabía que era mi tercera oportunidad de salir del país, salí de la Liga siendo campeón y eso me dio motivación. Cuando llegué acá me topé muchas cosas diferentes, todo me gustó, aunque fue difícil adaptarse al frío, a la intensidad, al fútbol rápido”, contó.
“Desde junio quieren comprar la ficha. Todo está encaminado porque ellos tienen la opción de compra, yo tengo el deseo de quedarme y ascender. Si todo sale bien, puedo quedarme por acá dos o tres años”, finalizó.