Celso Borges continúa en España. El volante nacional sigue en relación laboral con el Deportivo La Coruña de ese país, pese a que es consciente que en el club no cuentan con él, sobre todo por temas económicos.
Borges, que ha tenido conversaciones con equipos costarricenses para una posible vinculación, sigue sin poder maniobrar respecto a su futuro deportivo, porque mientras tenga relación con el Dépor no puede firmar con otro combinado.
El hecho que sea la misma institución la que quiera finiquitar al tico no quiere decir que el contrato ya firmado y con duración hasta junio del 2022 se rescinda.
Para volver al campeonato nacional debe desvincularse de La Coruña antes de que finalice la ventana de transferencias tica y además firmar por el equipo con el que tenga un acuerdo, no obstante esa desvinculación de los españoles es la que se ve compleja.
Celso se ha mantenido entrenando con los blanquiazules, pese a que no tiene ni siquiera número asignado para la temporada y en el plantel han sido agradecidos con el comportamiento que ha tenido.
Pese a lo anterior, Celso fue colocado en un sistema que se llama ERE (Expediente de Regulación de Empleo), el cual protege a empresas en mala situación económica y les da el aval de despedir, bajo condiciones no favorables, a los colaboradores con mejor remuneración.
Según informó el periodista de La Voz de Galicia, Xurxo Fernández, el despido por medio de la ERE lleva un proceso que con Celso todavía no se ha completado y por lo mismo el jugador continúa al servicio de la institución.
De hecho una salida al conflicto es que el nacional y la institución lleguen a un acuerdo de rescisión, situación que tampoco ha fructificado.
“Aquí iniciaron un expediente de regulación de empleo que es un mecanismo que dicta la ley para las empresas que están en situación económica crítica para que puedan despedir. Los clubes de fútbol no estaban utilizando esto, pero el Málaga lo usó y creó un precedente, ahora el Deportivo lo utiliza para liberar los salarios más altos de los futbolistas.
“En casi todos los casos el Deportivo llegó a acuerdos para rescindir los contratos y de esta forma no ejecutaron el mecanismo que básicamente lo que hace es reducir muchísimo la indemnización a pagar por el despido”, afirmó.
“Este mecanismo puede encontrar frenos en un juzgado, por lo que el club intenta llegar acuerdos con jugadores. Este expediente lo que permite es que la liquidación sea igual al salario de 20 días por cada año trabajado, con esto puedes imaginar que es un negocio muy malo para el futbolista... Con Celso se está tratando de llegar a un acuerdo porque quieren prescindir de sus servicios...”, agregó.
Una situación que ha llamado la atención en España es cómo Celso ha afrontado el proceso, porque continúa sintiéndose uno más de la planilla.
“Celso ha tenido un comportamiento excepcional, está entrenando, ahora lo usan en las prácticas como central, pero no va convocado a los partidos mientras se da una solución que no es sencilla. Él está encantado en Coruña, de hecho quería vivir acá. Celso tenía mucha ilusión por seguir acá y según amigos del camerino, la decisión le ha dolido bastante”, profundizó el comunicador.
En el país los rumores ubican a Borges en el Saprissa, club con el que ha tenido contactos, pero no han pasado más allá de las conversaciones de qué pasaría si cierra su salida del Deportivo.
Ahora también se ha escuchado de Alajuelense. Pero, lo cierto es que si alguno de los dos lo quiere, debe asegurarse que se libere y firme este mismo martes.
La Unafut tiene su cierre de mercado este 21 de setiembre y la única forma que un jugador puede tener una prórroga para llegar a Costa Rica es que sea desinscrito de su último club ocho días antes del cierre de inscripciones, esto le dará 10 días más para llegar a un equipo nacional.