Rónald Matarrita vive momentos de decisiones. El lateral izquierdo de la Selección Nacional tiene en la mesa un contrato muy tentador de parte del SC DNipro de Ucrania, también una opción de Rumanía y otra de la MLS.
Sin embargo, la ucraniana gana al resto por el beneficio económico y lo tiene prácticamente con un acuerdo para ponerse esa camiseta, sin embargo hay un tema que todavía no termina de convencer al mundialista de Qatar 2022.
Matarrita es consciente de que iría a un equipo que aunque no está, en este momento en Ucrania, pertenece a una nación que ha sufrido la crueldad de la guerra desde febrero del 2022.
Ucrania fue invadida por Rusia y desde inicios del 2022 ha tenido constantes enfrentamientos que solo han ido en aumento conforme avanza el tiempo.
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De hecho, ya el zurdo sabe que en su familia la oferta del SC DNipro no es vista con los mejores ojos. En conversaciones con sus más cercanos, al lateral le han insistido una y otra vez que priorice su bienestar sobre cualquier interés monetario.
Rónald también se encuentra corriendo contra el tiempo porque sus últimos entrenamientos competitivos fueron los que hizo con la Selección Nacional por la Copa del Mundo, seguidamente solo se ha mantenido haciendo trabajos diferenciados en el Centro de Alto Rendimiento de Alajuelense.
Para conocer a profundidad los retos que podría enfrentar Matarrita si se inclina por ir al club de Ucrania, La Nación contactó a un periodista del país europeo, quien dio una visión más amplia de lo que significa ir a un país en conflicto.
“El equipo estuvo entrenando fuera en Eslovaquia, pero recientemente decidió moverse nuevamente a Dnipro. Ellos en lo deportivo están muy bien, son los líderes y están haciendo una gran temporada”, manifestó David Kirichenko.
El comunicador explicó que en el aspecto social la ciudad se ha mantenido segura, pero no está exenta a verse afectada por algún tipo de ataque.
El 15 de enero el Washington Post informó de unas bombas que impactaron un complejo residencial en la ciudad. Para el periodista estas situaciones todavía pasan pero de forma más aislada.
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“Siento que dentro de todo se mantiene seguro. Dnipro-1 es un buen equipo que juega en Europa y si gana la liga esto significará que la próxima temporada estará en Liga de Campeones”, resumió Kirichenko.
Rónald todavía no da el sí definitivo, aunque en Ucrania ya lo esperan para que se ponga a las órdenes del que sería su nuevo club.
El jugador valora aspectos más allá del económico, pero todo hace indicar que si no sucede nada extraordinario que modifique los planes él terminará viajando a zona conflictiva para vivir una aventura particular para un futbolista.