PARIS (AFP) El tercera línea Juan Manuel Leguizamón sigue confirmando el acierto del Stade Français de París al decantarse por jugadores argentinos como Ignacio Corleto, el primer Puma que llegó al club de rugby parisino, Rodrigo Roncero, Pedro Ledesma o Juan Martín Hernández.
La historia de los Pumas y el Stade Français comenzó con la llegada en 2002 de Nani Corleto, que sigue en el club aunque está de baja desde que se operó del hombro en junio.
Leguizamón, de 25 años y 28 veces internacional con los Pumas, firmó por tres años en julio con el club de la capital francesa. En París se sumó a otros tres internacionales argentinos: los pilares Roncero y Ledesma y el apertura Juan Martín Hernández.
"Era muy importante para mí saber que tenía amigos en el mismo equipo", explica el tercera línea, que sentía "deseos de cambiar" después de pasar tres años en los London Irish.
El club parisino se puso en contacto con él en junio pero lo seguía "desde hacía mucho tiempo", según el entrenador adjunto encargado de los delanteros, Fabrice Landreau. "Nos interesaba su explosividad, su capacidad para avanzar, su tremenda eficacia en defensa", explica.
Esas cualidades quedaron de manifiesto en la reciente victoria del Stade Français en Biarritz (32-13) y en su derrota ante los Harlequins (10-15) el sábado en Copa de Europa.
El argentino, de 1,90 metros de estatura y 100 kilos de peso, supo llevar al equipo hacia adelante gracias a su potencia y anotó un try en cada encuentro.
"Empiezo a entender mejor el sistema", dice. "El juego no es tan distinto del que se hace en Inglaterra pero también tengo que adaptarme a la lengua. Al principio era difícil pero voy mejorando", añade.
Pero bastó una derrota ante el Brive para que a finales de septiembre saliera del grupo después de haber disputado los cinco primeros partidos del campeonato francés (el Top 14), cuatro como titular, pese a la gran competencia en su puesto con hombres como los italianos Sergio Parisse y Mauro Bergamasco.
Sin contar las dos jornadas de noviembre disputadas cuando estaba con los Pumas, Leguizamón no se ha perdido más que tres partidos esta temporada, todos por lesión. Como si ya formara parte del mobiliario de su nueva casa.
El sábado al visitar a los Harlequins, en Copa de Europa, recordará viejos tiempos. "Aprendí mucho en Inglaterra. Me hice profesional en los London Irish. En tres años, progresé mucho física y técnicamente entrenando dos veces al día, algo que no tiene nada que ver con Argentina, donde era aficionado", explica.
© 2008 AFP