
La final de la NBA entre los Cleveland Cavaliers y los Golden State Warriors marcará la historia del mejor baloncesto del mundo, pues desde 1947 que se juegan las finales de la NBA, nunca los dos mismos equipos lucharon en tres finales de manera consecutiva.
Desde dicho año, en 12 ocasiones distintas dos equipos disputaron el cetro de la NBA en años consecutivos, en el mayor de los casos, una muestra de lo competitivo que ha sido este deporte a lo largo de los años en Estados Unidos.
Inclusive, entre 1962 y 1969, los Boston Celtics jugaron ocho finales ante Los Ángeles Lakers, pero no se vieron las caras en tres años seguidos, ya que los San Francisco Warriors se metieron en las finales de 64 y 67 ante los Celtics.

Otras de las rivalidades recordadas fueron Los Ángeles Lakers ante los New York Knicks, que disputaron tres finales en cuatro años entre 1970 y 1973; los propios Lakers tuvieron una recordada rivalidad con los Detroit Pistons en las finales de 1988 y 1989, pero los angelinos no alcanzaron la de 1990.
LEA: LeBron James le gana duelo a Stephen Curry en las finales
Posteriormente, Michael Jordan y Karl Malone protagonizaron un pulso en las finales de 1997 y 1998, pero ninguno de los dos llegó a la del año siguiente.
La última vez que dos equipos jugaron finales consecutivas fue en el 2013 y 2014 entre los San Antonio Spurs y los Miami Heat, con un triunfo por bando.

Caras conocidas. Este tercer enfrentamiento tendrá 13 jugadores de las dos finales anteriores, siete de los Cavaliers y seis de los Warriors.
Los campeones son liderados por el mejor jugador de la NBA, LeBron James, seguido por James Jones, Kevin Love, Iman Shumpert, JR Smith y Tristan Thompson; quienes ya saben lo que es vencer a los Warriors y caer ante ellos.
Una de las grandes ventajas que han tenido los Cavaliers es que su quinteto titular del año pasado se mantiene para esta final.

LEA: Cleveland Cavaliers van por el bicampeonato de la NBA
En el bando contrario, los Warriors tienen seis jugadores en la actual planilla que ya estuvieron en las dos finales ante los Cavaliers. Ellos son Stephen Curry, Draymond Green, Andre Iguodala, Shaun Livingston, James Michael y Klay Thompson.
Los Warriors tienen una pequeña gran variante en su formación estelar con respecto al año pasado, con la inclusión de Kevin Durant, que volverá a verse con LeBron James en una final luego de la que perdió en el 2012 cuando jugaba para el Oklahoma City Thunder y El Rey lo hacía con el Miami Heat.
Mejores números. Estos dos equipos se han superado año tras años, para llegar a esta tercera final que podría ser la más pareja de la trilogía.
En el 2015 y 2016, los Cavaliers llegaron con marca de 12 ganados y dos perdidos en postemporada, pero para este año solo cayeron en un juego de la serie ante los Boston Celtics para finalizar 12-1.
Los Cavaliers vienen de pasarle por encima a los Indiana Pacers, Toronto Raptors y Boston Celtics.
LEA: Golden State Warriors barren a los San Antonio Spurs y son finalistas de la NBA
Por su parte, los Warriors quedaron 12-3 en 2015, 12-6 el año pasado y en esta temporada son el primer equipo en la historia de la NBA de comenzar con 12-0 en la postemporada, al barrer a los Portland Trail Blazers, Utah Jazz y San Antonio Spurs.

Técnicos estables. Una de las grandes ventajas de los dos equipos ha sido la estabilidad en los banquillos, ya que será la tercera vez que se verán Steve Kerr, técnico de Warriors, y Tyronn Lue, estratega de los Cavaliers.
Si bien es cierto en la primera de las finales Lue era asistente de David Blatt, ya conoce el teje y maneje de los actuales campeones de la NBA.
Lue llega a esta final con 40 años, después de una carrera de jugador que lo llevó por siete equipos en 11 años y donde tuvo sus mejores pasajes con Los Ángeles Lakers, donde fue campeón en 2000 y 2001.
Como técnico estuvo de asistente en Los Ángeles Clippers, Boston Celtics y Cleveland Cavaliers.
Por otro lado, la carrera profesional de Steve Kerr fue de 15 años, en la que jugó con siete equipos, pero se le recuerda por ser uno de los hombres de confianza de Phill Jackson en los Chicago Bulls de Michael Jordan, donde ganó tres títulos; luego ganaría dos más con los San Antonio Spurs.
Kerr ha tenido limitaciones para estar en el banquillo de los Warriors por un problema en la espalda, el cual ya lo afectó el año pasado cuando se perdió 43 juegos de temporada regular. Aún así, su equipo ganó 39 de esos. En esta postemporada se ha perdido los 12 juegos.
Los dos primeros juegos de la serie serán en el Oracle Arena, casa de los Warriors y los dos siguientes en el Quicken Loans Arena de Cleveland. En caso de ser necesarios más juegos uno sería en Oakland, el otro en Cleveland y un eventual sétimo juego en casa de los monarcas del Oeste.