La Selección Nacional de fútbol playa regresará mañana a la escena con la disputa de la primera Copa Uncaf , en El Salvador.
El equipo tico viajó ayer y se medirá en la cita amistosa a Belice, Guatemala y El Salvador.
Aunque no es clasificatoria a la Concacaf, la meta de la Tricolor es dar la pelea y procurar el primer lugar del torneo, luego de la serie internacional que jugó en junio ante Inglaterra.
“El certamen nos dará un parámetro de lo que hay en Centroamérica y también haremos un análisis de lo que tenemos, de lo que hay que mejorar o cambiar de cara al comienzo de la eliminatoria mundialista”, dijo su técnico, Franklin Zúñiga, en el sitio de la Fedefútbol.
Para este torneo Zúñiga eligió a dos porteros, Claudio Adanis y Enrico Regidor; a ocho laterales, Jason Campos, Gerald Mena, Danny Johnson, Christian Sánchez, Alfredo Aguilar, Jossimar Downer, Róger Mora y Kevin Álvarez; al pivote William León y a un jugador de cierre, José Antonio Mendoza.
Estreno. El debut tico será este viernes a las 3 p. m. contra los chapines, mientras que el sábado entrante a las 4:15 p. m. se enfrentará a los cuscatlecos y el domingo a las 3 p. m. a los beliceños.
Sobre los adversarios, el estratega del conjunto tico aceptó que solo conoce a El Salvador, que ha sido el representante más exitoso en el fútbol playa de la región.
Los salvadoreños alcanzaron un histórico cuarto puesto en el Mundial de la FIFA 2011, ganaron el título de la Concacaf en el 2009 y fueron tres veces subcampeones del área, en el 2008, 2011 y 2013.
La sede es el estadio del Centro Recreativo de playa Costa del Sol, en el departamento de La Paz, del sector centro-sur del país y a 65 km de la capital, San Salvador.
Allí, en territorio cuscatleco, los organizadores del Mundial, la Beach Soccer Worldwide, proyectan organizar el Premundial.