En una charla de amigos, los montañistas costarricenses Warner Rojas y Ligia Madrigal se tomaron un café, en la localidad de Namche Bazaar, ciudad que es conocida como La puerta de Los Himalayas, en su sueño de alcanzar la cumbre del Monte Everest, mientras compartían anécdotas y aventuras.
Warner, quien fue el primer tico en ascender a la cima del mundo, en mayo del 2012 (8,849 metros sobre el nivel del mar), espera coronar por segunda ocasión su hazaña y además subir el Monte Lhotse, la cuarta de mayor altura en el planeta (8,516 msnm).
Mientras, Madrigal luchará por ser la primera costarricense en llegar al punto más alto de la tierra, luego de su experiencia en deportes de aventura.
LEA MÁS: Warner Rojas parte hacia el Everest motivado por amigos y la montaña que lo vio crecer
La conversación entre los dos viejos conocidos se dio a los 3.440 msnm, muy similar a la altitud que se encuentra Base Crestones, en el Cerro Chirripó en nuestro país. Es una ciudad donde prácticamente todos los montañistas del mundo empiezan su aclimatación antes de subir al Everest o alguna otra de las montañas que circundan Los Himalayas.
“Nos encontramos en Namche Bazaar y la verdad es muy emocionante. Somos dos ticos, que nos encontramos en Los Himalayas con el objetivo de subir a la cumbre del Everest. Vamos en la misma dirección y eso nos llena de mucha felicidad y optimismo”, comentó Rojas a La Nación.
Por su parte, Ligia, en sus redes sociales, también destacó el encuentro con un amigo quien en el pasado fue de las personas que la motivó a practicar el montañismo y soñar con dominar el monte más alto de América y también alcanzar la cima del Everest.
LEA MÁS: Indomable atleta espera ser la primera tica en alcanzar cima del Everest
Caminos diferentes
Tanto Warner como Ligia viajaron con expediciones diferentes, pero que son empresas de los mismos dueños, por lo que esperan reencontrarse en el Campo Base del Monte Everest (5.300 msnm) en una semana aproximadamente, antes de intentar hacer cumbre en la segunda quincena de mayo.
“Con Ligia hablamos del viaje que le espera hasta el Campo Base, de lo que se va a encontrar. Nosotros tenemos más de 30 años de conocernos, de hacer montañismo y sabemos cuáles son las capacidades de cada uno. Le deseo lo mejor y espero que pueda cumplir con su objetivo, lo cual será muy importante para ella y para nuestro país”, manifestó Rojas.
Por su parte, Ligia tiene previsto salir en dos o tres días rumbo al Campo Base, donde empezará sus rotaciones de ascensos y descensos a los 6.000 y 7.000 metros, para aclimatarse a la altura, adaptar su organismo y tener mayor oxigenación antes del “ataque final” a la montaña.
En el caso del escazuceño, emprenderá su camino nuevamente a la montaña este miércoles, con el objetivo de alcanzar el punto más alto del Lobuche Peak, que se encuetra a 6.119 msnm, cerca del glaciar del Khumbu y proseguir con su adaptación a la altura.
LEA MÁS: Monte Everest recibe a 36 ticos que entre sus senderos disfrutan el viaje de sus vidas
“El fin de semana pasado logramos coronar el Island Peak (6,160 msnm). Estuvo muy ventoso y frío, bastante complicado, con condiciones muy adversas, pero es precisamente lo que necesitamos para adaptarnos. La intención es poder llegar entre el sábado y domingo”, admitió Rojas.
Warner admitió que en los próximos días debe tomar una decisión clave en su expedición, tras hacer cumbre en el Lobuche Peak, como es regresar al Campo Base o bien buscar otra alternativa para continuar con su aclimatación.
“En estos momentos hay demasiadas personas en el Campo Base y es contraproducente para escalar, por el paso de las grietas y las escaleras rumbo al Campo 1. Debemos tomar la decisión si nos mantenemos con el plan original e ir al Campo Base, desde ahora, o bien llegar días antes de intentar subir la montaña, en la segunda quincena de mayo”, declaró Rojas.