San Juan de Chicuá, Oreamuno. ¿Quién se imaginaría que aquel niño que a los 14 años fue atropellado por una bicicleta, en su natal Paraíso de Cartago, se convertiría en el mejor corredor del país del 2019, al ganar este miércoles 25 de diciembre la edición 55 de la Vuelta a Costa Rica SEC?
Su madre, Nidia Quirós Leandro, aún recuerda cómo su hijo, Daniel Bonilla, capo del equipo Scotiabak Nestlé, sufrió golpes muy fuertes tras ser arrollado por una bici y nunca espero que ese deporte lo apasionara, al punto que dos años después tuviera que darle permiso para que compitiera en los Juegos Deportivos Nacionales, representando a su natal Paraíso.
"Un chico se quedó sin frenos y le tiró la bici a Daniel. Tuvimos que llevarlo al médico, fue serio y nos llevamos un susto muy grande para nosotros como padres”, afirmó su madre.
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Por su parte, el papá de Daniel, Rónald Bonilla Bonilla, indicó que su hijo, quien en en 2018 había logrado el subcampeonato detrás de su líder Bryan Salas, siempre fue un joven muy obediente.
"Fue muy tranquilo, pero cuando cumplió 15 años le compramos una bicicleta de montaña y todo cambió. Él era compañero de colegio de José Mario, hermano de su coequipero Sebastián Moya, y juntos se iban a tirar por las peñas. Precisamente en el colegio fueron juntos a una carrera y allí lo observó el entrenador del equipo del cantón de Paraíso, Alejandro Meza, quien le vio cualidades como ciclista”, dijo Bonilla.
El progenitor recordó que el técnico Meza le pidió permiso para llevarlo a Juegos Deportivos Nacionales para que compitiera, aunque antes debía solicitarle a su madre el aval, pues para ella la prioridad era que su hijo estudiara.
"Le dije: ‘Mesita, no solo depende de mí. Déjeme decirle a mi esposa y si ella me dice que sí, está bien’. Ella es muy nerviosa y como el ciclismo demanda mucho riesgo, lo pensó. Al principio me costó convencerla un poco, pero le dije que lo dejara, que era una carrera y dijo que sí. En los Juegos le fue muy bien y ganaron la medalla de oro”, recordó el padre.
Sangre de ciclista. El orgulloso papá confesó que Daniel apenas tiene 10 años de pedalear formalmente, pues hasta los 15 años fue cuando realmente le gustó el ciclismo y empezó a competir.
“De niño no era un apasionado del ciclismo, pero creo que lo trae en la sangre, porque tiene un tío (Bolívar Bonilla) a quien le gusta mucho. Él corrió Juegos Laborales en Cartago con una empresa y creo que de allí es donde él saca más lo de ciclista”, agregó el papá.
Don Rónald, quien labora en el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), recordó que de niño llevaba a sus hijos a ver el paso de la Vuelta a Costa Rica, en el cerro de la Muerte o por Turrialba, pero más por fiebres que otra cosa.
“Como le fue bien en los Juegos Deportivos Nacionales, el entrenador Meza le dio una bicicleta de ruta y se emocionó más. Fueron a otros Juegos Nacionales y ganaron más medallas de oro. Después José y Elías Vega lo llevaron al entonces equipo de la Junta de Protección Social, que hoy es Scotiabank, y se empezó a desarrollar con Yurandir (Leandro) y 10 años después es el líder de la Vuelta”, recordó.
Don Rónald Bonilla manifestó que, como dato curioso, entre su hijo y el exciclista de Paraíso, José Adrián Bonilla hay un lejano parentesco.
"El abuelo de José Adrián y mi a abuelo son primos, por lo que hay una relación familiar lejana. Yo digo que son como primos 300 y ahora ambos son campeones de la Vuelta. De niño a Daniel le gustaba ir a pescar, pero no era de hacer tortas o que vinieran con quejas, siempre fue un niño bien portado”, añadió su padre.
Daniel actualmente estudia electrónica y tiene tres hermanos, Diego, Natalia y David, aunque solo él corre en forma profesional, pues ellos lo hacen de manera recreativa.