Los 12.90 segundos que tardó la atleta Andrea Carolina Vargas en completar la prueba de los 100 metros vallas, donde ganó la presea de oro para Costa Rica en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla 2018, se le hicieron una eternidad a su hermana Noelia.
La joven marchista de 18 años, quien terminó en la novena posición del Mundial de Atletismo Sub 20 en Tampere, Finlandia y también es entrenada por su madre Dixiana Mena, no podía ocultar su emoción y menos las sensaciones de ansiedad que la embargaron al ver triunfar a su hermana mayor.
“Sinceramente me puse más nerviosa que cuando compito. Fueron los 12 segundos más lentos de mi vida, todo parecía ir en cámara lenta y cuando ella ganó gritamos de felicidad mi padre (Juan Manuel), mi hermano Alejandro y un vecino que vio la carrera con nosotros. Todos nos abrazamos, gritamos y lloramos”, contó una feliz Noelia.
La joven marchista confesó que de ninguna manera se iba a perder la competencia de su hermana, a quien apoyó en todo momento.
“Lloré de la emoción. Sé del esfuerzo que ella hace todos los días por salir adelante, por ser mejor, por entrenar y dedicarle tiempo a su familia y al estudio. Cuando uno la ve triunfar se emociona, porque sabe todo lo que le ha costado y eso lo hace llorar a uno”, explicó Noelia.
La marchista explicó que un día antes de la competencia habló con su hermana e intercambiaron opiniones de la competencia.
“Le dije que habían muchas posibilidades de ganar una medalla, que tenía que salir rápido con mucha potencia para atacar las vallas. Estar muy concentrada y tener confianza porque había entrenado muy fuerte y tenía plena confianza en sus capacidades”, aseguró Vargas.
Noelia indicó que había recibido felicitaciones de amigos y conocidos a través de las redes sociales y el whatapp, que su teléfono no había dejado de sonar.
"Estoy demasiado contenta, no puedo explicar lo que siento. Ella hizo una excelente carrera. Fue la mejor en su vida deportiva hasta el momento. Fue un largo proceso, donde se esforzó y sacrificó muchas cosas para estar allí entre las mejores de los Centroamericanos y del Caribe”, agregó Vargas.
Ahora Noelia tiene un desafío más, pues espera estar junto a su hermana en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
“Mi especialidad son los 10.000 metros marcha, pero ya estamos en el proceso de empezar a entrenar los 20 km para buscar la marca de Tokio 2020. Sería muy lindo poder asistir con mi mamá y mi hermana a los Juegos Olímpicos. Para nosotras es como un sueño y estoy segura que lo vamos a hacer realidad trabajando juntas”, puntualizó Vargas.