El silencio apareció de nuevo, cuando más preguntas abundan. Esta vez entre los protagonistas del polémico Premio Claudia Poll, entregado a un nadador que ganó un mundial en categoría máster.
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Se trata de Jonathan Mauri, quien se rehúsa a hablar sobre el galardón recibido y los ¢233 millones que se le otorgaron por la obtención del polémico reconocimiento.
La Procuraduría General de la República tampoco dio la cara, pese a la solicitud de entrevista de este medio. A razón de los cuestionamientos hacia la manera en que el Estado se defendió y cómo procedió a llevar el caso, este órgano decidió iniciar "una investigación sobre los hechos relacionados con la defensa del Estado ejercido en el proceso contencioso administrativo".
Por esta investigación es que la encargada de prensa de Procuraduría, Vivian Burban, explicó que no pueden referirse al tema.
El procurador que llevó el proceso (ya pensionado), Ronny Basey, también esquivó las preguntas de este medio. Ante el pronunciamiento de la Procuraduría de abrir una investigación, su nombre sale a relucir, pues fue quien defendió al estado en el contencioso administrativo.
La historia empezó hace rato. Jonathan Mauri, hermano de la ministra de Deportes, Carolina Mauri, se postuló al premio Claudia Poll del 2010 después de ganar el campeonato mundial de 400 metros combinado, en categoría 25-29 años, durante el Mundial Máster de Natación en Gotemburgo, Suecia, en agosto de 2010.
La ley pretendía reconocer con el monto económico a los atletas medallas olímpicas o ganaran campeonatos del mundo. Fue tan mal redactada que nunca se aclaró que solo podían participar los atletas élite. Esto dejó un portillo abierto que aprovechó Mauri.
Mauri se postuló, pero al no ser elegido presentó un recurso de amparo en 2012. Al deportista se le rechazó el recurso, por lo que llevó el caso al Tribunal Contencioso Administrativo del II Circuito Judicial de San José, en donde se resolvió a su favor.
El procurador Basey evitó profundizar en qué fue lo que sucedió durante el proceso.
“No, de este tema no (voy a hablar). Aparte todavía tengo que ver muchas cosas porque yo ya no estoy en la Procuraduría, estoy retirado desde hace rato. No puedo dar ninguna declaración que sea importante o que sea seria”, explicó.
Ni Basey ni la Procuraduría explicaron si hubo apelación o no después de que el Tribunal dictó la sentencia, o cuáles pruebas se recolectaron para defender el caso.
La última protagonista es Carolina Mauri, la Ministra de Deportes fue duramente cuestionada luego de asistir a la premiación de su hermano. Ella se defendió aduciendo que se hizo presente a la ceremonia para acompañar a su pariente y no en su cargo de ministra.
Se desconoce si durante el mandato de Mauri, la Procuraduría le solicitó a este ministerio más información o algún criterio técnico, como parte de la recolección de las pruebas para la defensa del caso.
La Ministra evitó referirse a la investigación abierta por la Procuraduría.
El anterior Ministro de Deportes, William Corrales, presentó toda la documentación que le pidió la Procuraduría, así lo confirmó la directora del Icoder, Alba Quesada.
Sin embargo, Quesada dice que después de que Corrales entregó el expediente completo, no hubo ninguna otra petición de este órgano para buscar más pruebas.