A través de la historia, Costa Rica se ha dado el lujo de tener ciclistas de mucha calidad, pero es hasta este 2015 que se dio el despegue definitivo.
Ese camino en el que han figurado hombres como Evangelista Chavarría, José Luis Sánchez, José Manuel Soto, Carlos Alvarado (q.d.D.g.), Juan de Dios Castillo, Carlos Bermúdez, Adrián Víquez, Andrés Brenes, Federico Ramírez y José Adrián Bonilla sirvió como la guía para que nuevas generaciones aspiraran a más, a ver que sí se puede, que no hay límites y que al final de cuentas, en un pelotón, todos los ciclistas tienen posibilidades de figurar.
El gran paso lo dio Andrey Amador, convirtiéndose en el referente de todos al consagrarse como leyenda con apenas 28 años cuando terminó el Giro de Italia en el cuarto lugar de la clasificación general individual.
Ese hecho épico e histórico, que con solo recordarlo se nos eriza la piel y hace que se nos llenen los ojos de agua sirve de impulso para que todos queramos más y no solo de Andrey, sino de todos estos héroes en bicicleta, como Gregory Brenes, quien acaba de dar una nueva muestra de valentía.
Su rostro parece el de un boxeador que pierde por nocaut, tras caerse en el Tour de Utah, pero lejos de optar por lo fácil, él sigue en la pelea.
El año es magnífico tanto en ruta como en MTB y las damas no se quedan atrás.
Andrey Fonseca logró que el ciclismo de montaña de Costa Rica se clasificara para correr en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Josué González se hizo un nombre al intentar figurar en el pelotón colombiano y esa garra le ha dado réditos en lo personal y alegrías al país, porque él se proclamó subcampeón panamericano de ruta, por lo que Costa Rica también ya tiene al menos una plaza para decir presente en la prueba de fondo en carretera de la fiesta olímpica.
Milagro Mena demostró que a pesar de dedicarse más al MTB, también es buena para la ruta y por eso, es la flamante campeona de la Vuelta a Costa Rica.
Con visión, la Federación Costarricense de Ciclismo (Fecoci) impulsa la participación de la Selección Nacional en varias pruebas internacionales para obtener puntos en el ranquin América Tour de la Unión Ciclista Internacional.
Y con un poco de voluntad, se han logrado cosas importantes, como el hecho de que el campeón del América Tour y cuatro veces ganador de la Vuelta a Costa Rica, Juan Carlos Rojas, se diera el lujo de ser el primer hombre en vestirse de líder en una prueba en territorio cafetero.
Pero hay más y en esto, de verdad que el equipo Coopenae Extralum Economy se merece un aplauso de pie por ceñirse en que ya era hora de acabar con los miedos, derribar los mitos y salir del país para correr en una de las pruebas más bravas del calendario americano.
José Adrián Bonilla y sus pupilos están en la Vuelta a Colombia, simple y sensacionalmente, haciendo historia.
Desde que inició el giro cafetero, el pasado 2 de agosto, esta escuadra que avanza a pasos agigantados para ser el primer equipo continental del país ha sido protagonista, colocando a Josué González como el mejor extranjero y marcando un hecho importantísimo.
En la quinta etapa de la Vuelta a Colombia, el triunfo del día fue para el tico Paul Betancourt, un joven oriundo de Buenos Aires de Puntarenas que es el típico gregario, de esos que trabajan mucho y que se nombran poco.
Bonilla lo dijo muy bien: “Este es el triunfo más importante del equipo”, pero ellos saben que están para más.
Esto ya dejó de ser un sueño. Es una feliz realidad y con resultados convincentes y contundentes, desde el pelotón se le hace un llamado a las autoridades deportivas y las empresas privadas para que vean lo que siempre he dicho: vale la pena invertir en el ciclismo.
Otra muestra clara del crecimiento del ciclismo nacional es una gran noticia que dio a conocer La Nación, al revelar que la organización del Tour de San Luis invitó a la Tricolor a ser parte de esa competencia a la que asisten los equipos World Tour.
La incursión de Nestlé como patrocinador de Asociglobo Giant también llega en el momento preciso para rescatar a un equipo con gran talento.
Concuerdo plenamente con mi colega Gustavo Jiménez, quien me comentó: “El logro gigantesco de Paul ratifica que este es el mejor momento del ciclismo costarricense en toda su historia”.
Y lo mejor de todo, es que estoy completamente convencida de que muchas más alegrías están por llegar desde la carretera, con esa fuerza tica que anda a tope en bicicleta.
Me gustaría ver más competencias en el país, sigo pensando que hace falta nutrir el calendario, pero de que se va por buen camino, no hay duda.
*Fanny Tayver es periodista de Puro Deporte y es especializada en ciclismo.