La Unión Ciclista Internacional (UCI) sancionó durante un año al pedalista costarricense Enrique Artavia, del equipo Movistar-Coopenae-Economy, por consumo de sustancias no permitidas.
A Artavia se le comprobó la utilización de hydrochlorothiazide en el control antidopaje realizado en la tercera etapa de la Vuelta a Guatemala, disputada en abril pasado.
Según Daniel Muñiz, gerente deportivo del conjunto, el ciclista recurrió a dicha sustancia, también conocida como “rompe cálculos”, por padecer de piedras en los riñones desde el 2006.
Incluso, Muñiz dijo que es la primera vez que Artavia se ve inmerso en una situación semejante, pese a que consume la sustancia desde que se le dignosticó la enfermedad.
“Él tenía entendido que el medicamento era natural. Pero todos sabemos que nada de esto es 100% natural. Fue falta de conocimiento, algo inocente, porque había que analizar la sustancia”, dijo Muñiz.
No obstante, la situación de salud de Artavia permitió que la sanción no fuera aún mayor, pues ante la UCI se comprobó que el padecimiento sí existe.
El tiempo de sanción efectivo será de siete meses, pues desde mayo anterior, cuando el ente mayor del ciclismo mundial notificó al Movistar-Coopenae-Economy del posible caso, el equipo decidió prescindir momentáneamente de él.
De esta forma, se podría decir que Artavia ya cumplió con los primeros cuatro meses de sanción.
Muñiz agregó que no procederán a hacer ningún tipo de apelación, pues conoce la exigencia de la UCI y definitivamente en este caso hay poco por hacer.
Lo que sí pretende es que el caso le sirva de ejemplo para que en el futuro haya más cuidado con lo que consumen sus pedalistas.