Pekín. AFP. El estadounidense Brian Clay luchó ayer hasta la extenuación para hacerse con la medalla de oro en la prueba de decatlón de los Juegos Olímpicos de Pekín; pero de una vez comenzó a pensar en hacer historia e irá por su tercera medalla en los Juegos de Londres 2012.
“Estaba exhausto. Seguir adelante y no derrumbarme fue muy duro”, sostuvo Clay, quien se impuso al cabo de las diez pruebas y superó al bielorruso Andrei Krauchanka, plata, y al cubano Leonel Suárez, quien se colgó el bronce.
“No puedo expresar lo feliz que me siento por haber logrado algo por lo que he estado trabajando tanto tiempo.
“Es un sueño hecho realidad”, añadió Clay, subcampeón olímpico en Atenas 2004 y campeón del mundo de 2005, que se impuso con 8.791 puntos frente a los 8.551 de En toda la historia olímpica, nadie ha logrado ganar tres metales en decatlón. Únicamente el británico Daley Thompson y el estadounidense Bob Mathias sumaron dos oros.
Sin embargo, Clay, de 28 años de edad, tiene ya la mente puesta en subirse de nuevo al podio dentro de cuatro años en la cita londinense.
Reto. “Este es el comienzo de algo bueno y, si el cuerpo aguanta, espero ser capaz de repetirlo en 2012”, sostuvo convencido.
“Creo que nadie ha ganado tres medallas en los Juegos Olímpicos. Puede que ese sea otro objetivo”.
Clay, que ahora ostenta el título de “mejor atleta del mundo”, se colocó en cabeza por solo 88 puntos tras las cinco primeras pruebas disputadas el jueves: 100 metros lisos, salto de longitud, lanzamiento de peso, salto de altura y 400 metros.
Sin embargo, ayer tomó el mando a pesar de haber dormido tan solo cuatro horas.
Fue segundo en los 110 metros vallas, en el lanzamiento de disco tenía 950 puntos de ventaja y con sus 5 metros en salto con pértiga mantuvo la distancia.
Las cosas se complicaron tras el lanzamiento de jabalina (316 puntos), pero en los 1.500 metros sentenció su victoria a pesar de terminar de último.
Suárez se había puesto en cabeza pero Krauchenka ganó la carrera en un tiempo de 4:27.47 para arrebatarle la plata.
El checo Roman Sebrle, vigente campeón mundial y hasta ayer olímpico, terminó en la sexta posición.
En la primera jornada habían abandonado el estadounidense Tom Pappas, campeón del mundo de 2003, y el kazajo Dmitri Karpov, bronce en Atenas 2004.