El delantero Anthony Contreras volvió a ser punto alto en la Selección Nacional. Su entrega, lucha y no dar ningún balón por perdido son parte de su sello personal que lo hizo sobresalir en el duelo que se perdió 2-0 ante Panamá, por la Liga de Naciones.
En el Estadio Rommel Fernández, de Ciudad de Panamá, Contreras volvió a tener la confianza del seleccionador Luis Fernando Suárez al ser estelar y fue uno de los jugadores más incisivos en el compromiso durante la primera parte, aunque en el complemento, al igual que el resto del combinado patrio, bajó su rendimiento.
Sin duda Anthony será uno de los hombres con que contará Suárez para el partido del repechaje, frente a Nueva Zelanda el próximo 14 de junio, en Doha, Catar, para buscar el boleto a la Copa del Mundo.
Durante la primera parte, Anthony jugó mucho a espaldas al marco y corriendo a los costados en busca de los balones y aunque no es su fuerte, demostró mucha entrega y coraje para luchar cada una de las pelotas ante una zaga canalera bastante fuerte y posicionada.
La mejor ocasión de Contreras se dio al minuto 50, luego de un pelotazo largo donde el espigado delantero remató cruzado y el guardameta Luis Mejía apenas logró desviar para evitar mayores contrastes en su marco.
Al minuto 73, luego de un gran esfuerzo, Contreras salió de cambio y en su lugar ingresó Joel Campbell.
Luis Fernando Suárez, seleccionador nacional, recalcó el trabajo del artillero y destacó su desempeño en el terreno de juego.
“Contreras es un jugador interesante, importante para nosotros. Me parece que hizo un buen primer tiempo. En la segunda parte los sacamos porque estaba cansado, había hecho un esfuerzo grande y era necesario que saliera. Estoy contento, tranquilo, por su desempeño en el partido”, explicó Suárez.
Durante la eliminatoria rumbo al Mundial de Catar 2022, el oriundo de Pavas jugó cuatro partidos, para un total de 256 minutos y anotó dos goles frente a El Salvador y Estados Unidos. El joven de 22 sin duda fue una de las gratas sorpresas en la eliminatoria, logrando ganarse un puesto en la ofensiva de la Tricolor.