La Selección Nacional de Fútsal encontró su mejor versión en el empate 2-2 ante Argentina y ahora su mayor preocupación es descifrar cómo contener al portugués Ricardinho, en los octavos de final.
Costa Rica mejoró de forma sustancial ante la Albiceleste y aunque dejó ir una ventaja de dos goles, logró, por primera vez, clasificar a un cuarto partido en un Mundial de Fútsal.
En octavos de final, la Tricolor se topará con Portugal en el Coliseo El Pueblo en Cali el miércoles a las 7 p. m. Los portugueses culminaron como líderes del grupo A con siete puntos y en sus filas está Ricardo Filipe da Silva Braga, Ricardinho.
El luso es el jugador de moda, nombrado como el mejor del planeta en el 2010, el 2014 y en el 2015. El único portugués que ha logrado ese galardón se lució ante Uzbekistán (5-1) con una jugada de sombrerito que su compañero Djo convirtió en anotación.
Por su parte, Costa Rica debe mejorar aún más y mostrar el nivel con el que ganó el Premundial de Concacaf. La Sele demostró ayer que puede enfrentar a rivales más potentes, si es preciso en su juego.
En el partido ante los argentinos, el combinado patrio controló el juego en varios tramos y tuvo opción de dejarse la victoria.
Uno de los puntos altos fue el portero Álvaro Santamaría, ya que en la primera parte tapó varios remates que permitieron que Costa Rica llegara al descanso con ventaja mínima, gracias al gol de Juan Cordero, quien aprovechó un despeje corto para anotar en el minuto 18.
La segunda anotación fue obra de Edwin Cubillo, quien aprovechó un contragolpe en el 29’ y puso el 2-0 momentáneo.
Sin embargo, Argentina descontó rápido por medio de Santiago Basile (30’) y con Fernando Wilhelm (34’) empató el juego.