De nuevo la Selección de Costa Rica perdió (1 a 0 ante Guatemala), una vez más las caras largas, la frustración. Sin embargo, no es solo por el resultado, sino por el mal funcionamiento de una Tricolor que para adelante ofrece poco, en defensa perdió el orden y las caras nuevas aportan poco o nada.
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El análisis ante los chapines dejó muchas dudas y el problema es que escasean las respuestas:
- Cambio a un equipo más ofensivo no se ve o carece de ideas
Después del Mundial de Qatar 2022, Luis Fernando Suárez se empeñó en vender la idea de que busca un equipo más ofensivo. En sus comparecencias defiende que está realizando modificaciones tácticas y de movimientos, para no solo ser una selección que se mete atrás a esperar. Sin embargo, en los tres partidos del 2023 no se ve nada de esto.
Si se toman en cuenta los duelos ante Martinica y Panamá, en Liga de Naciones, y el fogueo ante Guatemala, apenas se marcaron dos goles. Incluso, si nos quedamos solo con el compromiso contra los chapines, la producción en ataque fue de cuatro remates directos, cinco desviados y solo cinco tiros de esquina.
En la Selección puede defender que intentaron proponer y buscaron ir hacia adelante en su última presentación, pero con un plan deficiente, sin claridad y con muy mala salida desde los centrales. Al final, quedó en evidencia la frustración que viven los delanteros al estar aislados, no tener asociaciones y la poca respuesta a la presión que ejerce el rival.
Es más, por el querer ir al frente ante los guatemaltecos, los dos volantes centrales solían salir al mismo tiempo; la consecuencia la pagaron los centrales cuando los chapines recuperaban y salían. Esto es un fiel reflejo de descoordinación y es que el adversario con ahogar la salida y recuperar los segundos balones hizo más daño.
- Cristopher Núñez y Wílmer Azofeifa no dan respuestas
El técnico Luis Fernando Suárez y todos los futboleros en Costa Rica teníamos la expectativa de ver cómo sería la Selección Nacional sin Celso Borges y Yeltsin Tejeda. A decir verdad, el ensayo con Cristopher Núñez y Wílmer Azofeifa no dio respuestas positivas.
Ni Núñez, ni Azofeifa son marcadores, pero más allá de esto, lo que les costó ante Guatemala fue coordinarse para no dejar expuesta a la línea de cinco. Por muchos momentos los chapines tomaron a los centrales sin ningún escudero por delante de ellos.
Wílmer dio mejores pinceladas y buscó generar algo de salida, aunque no logró conectar o asociarse. En lo que respecta a Núñez, se le vio a otro ritmo, sin la intensidad necesaria y fue presa fácil cuando trató de conducir. La falta de competencia le pudo pasar factura a estos futbolistas o posiblemente fue la carencia de un contención nato que los respaldara.
- Pablo Arboine de lo poco positivo
Pablo Arboine llegó a la convocatoria para la Copa Oro de emergencia, ante la lesión de Óscar Duarte. Por primera vez se puso a las órdenes de Luis Fernando Suárez y fue de los pocos que dejó buenas sensaciones y se mostró a la altura.
El defensor de 25 años estuvo atento a las coberturas, se le vio con mucha velocidad, se impuso en la mayoría de los duelos y dio más opciones a la zona central. Su rapidez aporta algo muy distinto a la zaga y hasta puede funcionar como lateral.
Con Saprissa fue estelar a lo largo de toda la temporada y destacó justo por esa buena lectura para anticipar y para coordinarse en la línea de cinco.
- Diego Campos sigue siendo un desconocido
Diego Campos es la gran sorpresa de Luis Fernando Suárez para la Copa Oro. A sus 27 años no se le conocía en Costa Rica y nunca le habíamos visto un partido con la Selección.
En su debut con la Nacional no la pasó nada bien. Suárez reveló que Campos puede jugar en todas las posiciones del ataque y frente a Guatemala lo ubicó como extremo por izquierda. Sin embargo, apenas si tocó balón y de mitad de cancha hacia adelante ofreció muy poco. Si bien, realizó un disparo directo, su aporte fue muy limitado.
Diego corrió e intentó asociarse, pero no le fue posible. El futbolista que actualmente milita en el Degerfors IF, de la Primera División de Suecia, salió de cambio al medio tiempo.
El propio futbolista y todos nosotros necesitaremos verlo más, para realmente conocerlo y valorar si tiene lo necesario para estar en la Nacional.
- El “9″ siempre aislado
Sin importar el “9″ juegue, hay una constante en la Selección de Costa Rica: siempre se le ve aislado, juega en todo momento de espaldas al arco, nunca con ventaja y debe ir más a los costados o bajar a la zona media, para intentar tocar balón.
Ante Guatemala, Anthony Contreras fue el titular y la historia se repitió. Al atacante no lo acuerparon, mucho menos le dieron balones con ventaja y se terminó diluyendo, al correr de un lado a otro. Contreras no tuvo socios y fueron contadas las ocasiones en las que se le vio dentro del área.
Para el siguiente fogueo, frente a Ecuador, Luis Fernando Suárez cambiará al delantero, pero si la propuesta se mantiene, el resultado será el mismo.
- Vida sin Bryan Oviedo y Rónald Matarrita no es prometedora
Bryan Oviedo y Rónald Matarrita han alternado la titularidad en los últimos tres procesos de la Selección Nacional, pero luego del Mundial de Qatar 2022 no fueron convocados. La vida sin ellos es incierta.
Frente a Guatemala Jefry Valverde fue el sacrificado, al jugar a perfil cambiado; de mitad de cancha fue uno y para defender otra muy distinta. Valverde buscó proyectarse, intentó llegar a línea de fondo y generar, sin embargo, sus transiciones defensivas fueron deficientes y le robaron las espaldas una y otra vez. Así mismo, no pudo asociarse con su volante.
En este análisis podemos sumar a Keysher Fuller, quien por la derecha tuvo los mismos problemas. En este costado tampoco hay seguridad y tocará observar a Carlos Martínez, para conocer si hay respuesta.
- Solución a una nueva ausencia de Keylor Navas
Kevin Chamorro tuvo una temporada sobresaliente con Saprissa y fue clave para el bicampeonato. Chamorro se dejó el trofeo de mejor arquero del Apertura 2022 y Clausura 2023. Debutó con la Selección Mayor apenas en marzo del 2023 y no le pesó la camiseta en los duelos ante Martinica y Panamá, en la Liga de Naciones de la Concacaf.
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En el fogueo frente a Guatemala fue de los pocos que levantó la mano y dejó ver que es una solución real, ante una nueva ausencia de Keylor Navas para la Copa Oro.
Navas es el estelar y nadie duda de él, pero desde el 2011 no está en el certamen del área. De igual forma, para el 2023 Chamorro se perfila como el “1″ y con sus tapadas y su buen desempeño, da confianza.
- Los de siempre cargan con el equipo
Por más que el técnico Luis Fernando Suárez se equivoque o no en el planteamiento, es claro que abre las puertas de la Selección para probar. Sin embargo, son pocos los nuevos que realmente dan una respuesta.
Al final, Kendall Waston, Francisco Calvo, Celso Borges y Joel Campbell son quienes deben y cargan con el equipo. Los debutantes aún no están del todo listos, las figuras intermedias no dejan ver ese nivel para aguantar el peso y en el funcionamiento todo se refleja.
Contra Guatemala el equipo al menos mostró una leve mejoría con los de siempre. Por más ímpetu de Warren Madrigal, Carlos Mora o Roan Wilson, quienes sumaron de cambio, tampoco es que lograron enderezar el rumbo junto con los más experimentados.