Costa Rica enfrentará en la Copa del Mundo de Qatar 2022 a tres equipos muy poderosos en lo físico y colectivo, de los cuales dos de ellos han sido campeones mundiales.
La Selección Nacional tiene una bonita combinación de juventud y experiencia; ese es el gran reto del profe Luis Fernando Suárez; la transición a una Selección de nuevas figuras que deseen comerse el mundo jugando.
Vivo al máximo todo lo que sucederá en este Mundial de Qatar con nuestra Selección, pues desde muy chico he representado a Costa Rica con el mayor orgullo del planeta. Un país sin ejército, lleno de verde y además uno en el cual nos enseñaron a no temerle a nadie.
Un día el exjugador Mauricio Chunche Montero contaba que en el Mundial de Italia 90, con videos de cinta VHS, le enseñaban a quién tenía que marcar o “anular” y así lo hizo a cabalidad. El estudio previo de los adversarios ya no es casualidad, es obligación; cada detalle cuenta.
En Brasil 2014, los volantes Celso Borges y Bryan Ruiz promediaban casi 12 kilómetros recorridos por partido. Ahora esa responsabilidad les toca a los más jóvenes. Seguir los pasos y contagiarse de ese espíritu de sus capitanes; luchar todos los balones, correr como si no hubiese mañana, defender, atacar, estar concentrados. ¿Por qué? El planeta entero los mira y toda una nación los apoya hasta el último minuto.
Mencionaban los conocedores de cómo la disciplina táctica presentada en aquellos mundiales de Italia y Brasil podría catalogarse como la clave para el papel que se hizo en ambas presentaciones.
Es que, más que memorizarlos, se deben aplicar al pie de la letra y además con una capacidad de reacción ante diversas situaciones surgieron como herramientas vitales en el accionar de nuestros jugadores.
Cuando competía siempre llevaba varios planes, verse en tercera persona tomando decisiones de momento para reaccionar y estar preparado para sobreponerse ante la adversidad. Por eso muchachos hagan honor al lema que los acompañó en la eliminatoria, toca darlo todo: ¡hasta el último minuto!
Hace más de 20 años, cuando apuntaba a unas de mis primeras presentaciones en una Copa del Mundo (Japón), tuve la oportunidad de alinearme aquella vez junto al campeón del mundo del momento (el australiano, Chris Hill) y a quien admiraba por su potencial.
Momentos previos al arranque le conté que era un novato y que deseaba hacerlo de la mejor forma; a lo cual respondió: ‘Hoy no tenés nada que perder’ y para aquella persona que entiende eso, se puede convertir en su arma más letal.
Yo sé que todos los seleccionados quieren ganar y nosotros queremos ver esa actitud en todos los juegos. ¡Muchachos salgan a ganar!
Sueñen en grande, piensen en grande, ejecuten en grande. ¡Hasta el último minuto, a ganar!