El defensor y capitán de la Selección Nacional, Francisco Calvo, no podrá olvidar su partido número 100 con la camiseta de la Tricolor.
Francisco marcó un golazo de chilena en el cierre del compromiso, que selló la victoria 3-0 y la clasificación de la Selección en el primer lugar del Grupo A.
El triunfo valió el boleto a los cuartos de final de la Liga de Naciones de la Concacaf, donde Costa Rica enfrentará a Panamá.
Calvo, zaguero del Hatayspor de la Superliga de Turquía, anotó su cuarto tanto con el combinado patrio en la Liga de Naciones, consolidándose como un hombre de experiencia en la defensa y de confianza para el técnico Claudio Vivas, quien le otorgó la banda de capitán.
“Quiero agradecer a la gente que vino al Estadio Nacional y creyó en nosotros. Sabíamos lo que nos jugábamos contra este rival. Dimos un golpe de autoridad, un golpe en la mesa. Somos un país que siempre debe estar ahí arriba, y logramos la clasificación”, comentó Calvo.
Francisco también expresó su felicidad por el trabajo del combinado nacional y su destacado desempeño en el equipo.
“Es un privilegio, no solo anotar, sino formar parte de la Selección Nacional. En este partido vino toda mi familia a verme, incluso mi abuelita, que nunca viene al estadio. Le agradezco a mi mamá, a mis hermanos. Es una gran felicidad lo que hemos logrado. Tenemos un grupazo y tenemos que agradecerle a Dios por esta oportunidad”, confesó Calvo.
Al consultarle sobre los 100 juegos con la Selección Nacional -aunque seis de ellos no sean de clase A, según FIFA- y el hecho de celebrarlo con una anotación, Francisco indicó que fue un momento único.
“Vivo un sueño de niño, siempre luché y trabajé con el apoyo de mi familia. Tengo que agradecer a todas esas generaciones de jugadores con las cuales jugué. Me siento con más ganas y más vivo que nunca. En cuanto al gol, solo puedo decir que fue un instante, una milésima de segundo cuando hice la anotación. Tengo que darle gracias a Dios. Fue un momento muy emotivo”, aseguró Calvo.