Luis Fernando Suárez asegura que el partido de repechaje entre la Selección de Costa Rica y su similar de Nueva Zelanda ni siquiera fue pensado estratégicamente así, como se desarrolló.
“Nosotros tuvimos esa situación de marcar muy rápido y después lo que sabíamos que Nueva Zelanda tenía, una fortaleza física grande y que siempre íbamos a tener problemas, sobre todo en el fútbol aéreo”, expresó el técnico colombiano, luego de llevar a la Sele por la ruta correcta hasta el Mundial de Qatar 2022.
“Creo que el primer tiempo fue mucho más complicado que el segundo, nosotros necesariamente teníamos que hacer algunos cambios como para tener un poquitico más la pelota y creo que un poco se aliviaron las cargas con la entrada de Bryan Ruiz y con los tres cambios que hicimos”, relató.
También cree que esa línea de cinco que hicieron atrás funcionó para defenderse bien.
“El partido se manejó de esa manera y había que hacerlo. Yo creo que es importante. El fútbol tiene esas situaciones en las que uno tiene que saber responder y creo que nosotros lo hicimos bien en defensa y después, hoy estoy aquí, hoy estoy pensando en la clasificación y eso es lo que más me importa, que clasificamos al Mundial y que le ganamos a Nueva Zelanda, un equipo muy fuerte”, aseveró Suárez en la rueda de prensa posterior al triunfo de la Sele, con ese gol de Joel Campbell.
¿Cuál es la lección aprendida, porque fue un camino empedrado, con una primera fase muy irregular, sino de dudas y que culmina con éxito?
Yo creo que lo más importante de todo esto es que el equipo nunca bajó los brazos. Quiero que lo vean en el mejor contexto, cuando la cosa estaba mal, hubo por ahí un trino de Rónald Matarrita con algo sobre las circunstancias que estábamos viviendo en ese momento y lo dijo de una manera tal que de pronto se sintió mal.
Dijo algo como que espero que cuando clasifiquemos al Mundial esta misma gente que hoy nos está matando, después no esté alentándonos y buscando de alguna manera decir también que es su victoria.
Es cierto que el contexto es feo, pero lo quiero decir en ese sentido, claro, el equipo nunca bajó los brazos. El equipo tiene una resiliencia muy grande, el equipo aguantó un montón de cosas.
Y no solamente el equipo, la Federación, los clubes, el cuerpo técnico y todos aguantamos todo ese palo que nos dieron y seguíamos para adelante y para adelante, aún en con todo el palo.
Creo que eso hoy refleja muchas cosas, refleja la unión de grupo, la sinergia del equipo, el estar convencido de que se podían conseguir cosas, el que hay dar mucho para poder conseguir esto.
De estos jugadores yo tengo un orgullo profundo por ellos, porque en mi vida nunca había dirigido un grupo humano como este, de que tiraran tanto para adelante, de que no pensaran en uno solo, sino en un conjunto. Creo que aprendí a que todavía tengo muchas cosas por aprender.
¿Cuánto le ilusiona que este grupo enfrentará selecciones de la talla de Alemania, de España y Japón en el Mundial?
No me acordaba de ese grupo (ríe...). Lindo, es lindo y hay una lección que me enseñaba mi papá, Francisco Maturana y es que los triunfos hay que celebrarlos 24 horas y las derrotas también, solo 24 horas. Me quedan unas 23 y ya luego pensaré en otra cosa, pensaré si hay algo para hacer después.
En este momento lo único que yo quiero es ser feliz, estar contento, tener un descanso en determinado momento por la aprehensión y el estrés que manejé y que valió la pena.
Este miércoles pensaré en lo que hay que hacer. Déjeme este ratico de felicidad que es muy complicado en el fútbol vivirlo, el fútbol es tan cruel a veces que uno este momento lo vive cada ocho años, porque ni siquiera es que cada cuatro clasifico. Cada ocho... Y lo voy a celebrar.
¿Qué puede decir del grupo que enfrentará en el Mundial?
Todos los partidos son complicados, nosotros lógicamente y creo que lo más importante, es que si queremos ser protagonistas en el Mundial y queremos ser protagonistas en el grupo que nos tocó, primero tenemos que mejorar mucho. Tenemos que mejorar muchísimo.
El grupo básicamente lo que hizo fue clasificar a algo que era importante y se hizo bastante bien en la parte defensiva, pero todavía falta algo por hacer y en ese sentido, estos seis meses servirán para ello.
Para que la propuesta nuestra después de mitad de cancha hacia adelante sea mucho mejor, porque queremos ser protagonistas, queremos ser competitivos y hoy, creo que tenemos mucho que mejorar.
La próxima semana cumple un año en la Selección de Costa Rica. ¿Ya dimensionó lo que logró hacer? ¿Cuánto mérito tiene usted?
Mucho y lo dimensiono y es cierto, porque es sobre la marcha intentar cambiar muchas cosas, que a veces era como imposible hacerlo y sin embargo se hicieron.
Tengo el poder de convencimiento como para que eso se dé. Este año merecería escribir un libro, donde cada partido es un capítulo, porque hay una historia en cada capítulo.
Lo importante de esto es que creo que yo fui un facilitador y en eso me considero que soy experto, para facilitar las cosas. La planeación, se hizo por parte de todos los miembros del cuerpo técnico, todos copiaron e hicieron las cosas bastante bien.
Intentar convencer a Keylor de querer ir a un Mundial es muy fácil, intentar convencer a Bryan de que este será su último Mundial y a Celso, a todos... Es muy fácil.
Si hay algo que es fácil es manejar o ser facilitador de gente tan inteligente. Mi mérito es conocer a esa gente tan inteligente y ya después tener una buena sinergia con ellos y eso creo que fue lo que pasó.
Mencionó tres nombres que en parte del proceso los defendió cuando se les criticó, cuando se les señalaba y se medían diferente, tal vez injustamente. Ellos ya nos han clasificado a tres Mundiales. ¿Qué significa para usted el poder celebrar con ellos, con Keylor, con Celso y con Bryan?
No quiero ser grosero, pero de verdad yo no me explico cómo hubo un momento, hace un año, donde había gente que decía de estos tres que no deberían estar más en la Selección. De verdad no lo entiendo.
No entiendo al ser humano, a veces nosotros somos así, básicamente es lo que puedo decir, porque son grandes seres humanos.
Hablamos de los tres, pero yo tengo que ser justo con los demás. A Joel Campbell lo conocía solamente como jugador y después ya lo quiero más como persona que como jugador y todos los demás.
Hay muchas cosas que de verdad estoy sorprendido gratamente, porque he visto un nivel grandísimo en esta clase de jugadores.
Casi me animaría a decir que este ha sido el mejor equipo que he podido dirigir y estoy feliz por ello.
¿Qué es lo que más celebra, la clasificación al Mundial o haberla logrado con una mezcla de jugadores de mucha experiencia con jóvenes que usted se atrevió a poner ahí? ¿Lo ilusiona el Mundial por sí mismo o porque va a tener oportunidad de ver que estos jóvenes serán el recambio que se necesitaba?
Lo que más celebro en este momento es la clasificación, después habrá tiempo de mirar de qué manera se pueden hacer cosas, sí se pueden hacer.
Hoy solamente me queda eso, la clasificación, nos la merecíamos, trabajamos por ello, trabajando un año entero para ello y lo logramos, porque hicimos bien las cosas.
¿Qué se puede esperar de Costa Rica en el Mundial?
No van a ver este equipo, van a ver un equipo totalmente diferente, que eso es lo que espero yo.
Desde aquí tenemos que construir un equipo que mejore muchísimo más respecto a lo que hasta ahora hemos demostrado, que dentro de las circunstancias que nos ha dado esta eliminatoria, por todo lo vivido y por todos los contratiempos que hemos tenido, había que hacer cosas complicadas sobre la marcha.
Pero creo que hemos respondido bien. Yo espero que cuando juguemos ese partido contra Alemania, sea otra Costa Rica la que enfrente a un equipo tan fuerte.
¿Cuál sería la planificación ideal de ahora en adelante con respecto a la Selección, incluso tiene 15 partidos consecutivos oficiales y a veces pensamos que a usted no le gustan los fogueos? ¿Para llegar a la Copa del Mundo se necesitan fogueos?
Habrá poquito tiempo, eso es lógico. La preparación nuestra va a ser poca por esa razón y hay que pensar en terminar el torneo y luego empezar el próximo muy pronto. Va a ser muy difícil.
Vamos a mirar, me voy a reunir pronto cuando llegue con la Comisión de Fútbol para ver de qué manera podemos buscar más que partidos de fogueo, entrenamientos.
Puede que usted no esté de acuerdo conmigo y lo respeto, pero a mí me gusta más entrenar que jugar, por qué razón, porque jugamos y entrenamos como un club y a veces los partidos no te dan muchas cosas. Es mi pensamiento y obviamente espero que me lo respeten.