Pésima decisión la de Manfred Ugalde, quien derrumba la imagen de un joven sensato y que ha ido escalando y con los pies sobre la tierra.
A lo mejor habría que decir que quien me decepciona es “su asesor”, en esta decisión de “renunciar a la Sele mientras esté el técnico Suarez”.
Esto no es una defensa del colombiano, seguramente equivocado en el manejo y la explicación de la no alineación de Manfred en el partido contra Jamaica.
Pero a un posible error no se responde con otro, ni a una supuesta exposición pública se acomete con un acto de revanchismo como lo ha hecho el llamado “nuevo Kun”. Es un acto de rebeldía y de soberbia que esta vez lo auto expone y le coloca como modelo de “la generación de cristal”, la que se cree gallo cuando todavía es un pollito.
La Selección no va a quedar eliminada por no tener a Ugalde. Si eso ocurre, será por muchos otros factores y decisiones erradas, que en su mayoría se han tomado afuera de la cancha.
Lo malo del paso dado por Ugalde es el mensaje. “Yo estoy por encima de los intereses del equipo.” “Muchachos, si no los ponen o si el profesor los critica, sigan mi camino”, " ¿Cómo van a sentar y a exponerme a mí, que juego en Holanda y ya me llaman el Kun?”
En ese afán de exponer al técnico, como acto reivindicativo, se desnuda a sí mismo, al no guardarse la rabia para una futura ocasión y desatarla con fútbol, en el único escenario en donde puede denostar el error de Suarez: en la cancha y con La roja puesta.
Repito. Está mal asesorado. Tan mal que de seguro su “asesor” esperó a confirmar que para esta vez no recibió convocatoria y le escribió la carta que Manfred firmó.
Pregunto: Si su técnico del Twente, Ron Jans, se atreve a criticarlo o a analizarlo públicamente, ¿también renunciará al equipo? ¿Si algún día vuelve a la Selección lo tienen que alinear por este antecedente? ¿Cómo habrá que tratar a Ugalde en el futuro, cuando se ponga la camiseta tricolor, si se llega a convertir en una estrella “verdadera” en el futbol europeo?
Randall Leal, quien culpa a la prensa y sus críticas del rendimiento de algunos jugadores en la Selección, evidencia que esto no es un episodio aislado. Un jugador que no pueda con criterios negativos, aun injustos y de su entrenador, debería dedicarse a otra cosa.