San Antonio (Texas). San Antonio brindará un homenaje en toda la ciudad mañana a los Spurs, campeones de la NBA.
Las festividades comenzarán en el centro de San Antonio y se desplazarán al Alamodome, donde el equipo jugó durante nueve años antes de mudarse en esta temporada al SBC Center.
“San Antonio organiza grandes fiestas y esta será una nueva fiesta para recordar”, dijo el alcalde Ed Garza en un boletín.
Los Spurs vencieron a los Nets de Nueva Jersey 88-77 el domingo y se impusieron en la serie final por cuatro partidos contra dos.
Miles de aficionados se concentraron en el centro al finalizar el partido la noche del domingo. Caravanas de autos recorrían las principales arterias a paso de hombre, con racimos de personas asomadas por las ventanillas.
Cuando los Spurs ganaron su primer título en 1999, 300.000 personas se congregaron en el paseo junto al río para ver pasar al equipo y el trofeo en balsas.
En esta fiesta participarán jugadores presentes y pasados, políticos y otras personalidades.
En una balsa irán alumnos de la Academia Carver en homenaje al pivote David Robinson, quien está a punto de retirarse y aportó $9.000.000 de su dinero para crear la escuela para niños pobres.
El futuro
Pero los Spurs no se quieren embriagar con los festejos y ya comenzaron a perfilar el equipo de la próxima temporada.
David Robinson se retirará. También podría irse Steve Kerr. Steve Smith, Danny Ferry y Speedy Claxton probablemente se marcharán a otros equipos. Y quizás tampoco sigan Stephen Jackson y Kevin Willis.
Solo cinco jugadores –el argentino Emanuel Ginóbili, Tim Duncan, Tony Parker, Malik Rose y Bruce Bowen– tienen contrato para la próxima temporada.
Los Spurs, conscientes de que sus rivales en la Conferencia Oeste se reforzarán, ya han puesto el ojo en el que será el agente libre más codiciado, Jason Kidd, quien terminó su contrato con Nets.
“Debo hallar un equipo que tenga mejores posibilidades de ganar el torneo o con unos Nets reforzados”, anunció Kidd.