París . El estadounidense Pete Sampras vivió un auténtico Calvario para superar hoy la primera ronda del torneo de Roland Garros, donde el costarricense Juan Antonio Marín le tuvo en la pista durante cuatro horas y 18 minutos.
Sampras venció por 6-7 (5-7), 6-4, 7-5, 6-7 (9-11) y 6-4 utilizando todas sus fuerzas y escapando de la derrota en varias momentos.
Marín, situado esta semana en el puesto 92 de la clasificación mundial, y un excelente jugador en tierra batida, luchó también hasta la extenuación pero no supo decidir en varios puntos decisivos.
El costarricense, criado tenísticamente en España y que se nacionalizó de este país en mayo de 1998, tuvo tres puntos de set en el tercer parcial, que Sampras desbarató con dos buenas subidas y un revés a la línea.
El drama para el estadounidense se produjo en el interminable cuarto set, en el que Marín salvó ocho puntos de set. Sampras tuvo dos de partido en el desempate, pero en el primero rodó por el suelo y acabó embadurnado con la tierra roja de París, al intentar atajar una volea. En el segundo, su brazo le falló y entregó el parcial con una de las 14 dobles faltas que acumuló hoy.
Finalmente, Sampras logró aguantar los intercambios e imponerse a Marín en el quinto set, para medirse en la siguiente ronda contra el ucraniano Andrei Medvedev, otro jugador que seguramente le castigará de nuevo en la pista.
Sampras lucha en París por conseguir dos objetivos. Recuperar el puesto de número uno del mundo y ganar por primera vez este Grand Slam, el único que falta en su carrera. De conseguirlo igualaría el récord del australiano Roy Emerson con 12.