Un hat-trick del inspirado mediocampista, Xherdan Shaqiri, permitió ayer a Suiza acceder por sexta vez a la segunda fase de la Copa del Mundo, dentro de sus diez participaciones en la fiesta del fútbol.

Sus tres anotaciones en la indefensa portería de Honduras, en Manaos, lo convirtieron en el segundo futbolista en Brasil 2014 que lo logra, después del triplete del alemán Thomas Müller a Portugal.
Históricamente, el denominado Messi de los Alpes es el quincuagésimo jugador que lo alcanza en una Copa y el segundo helvético, luego de que Josef Huegi, lo hiciera hace 60 años ante Austria, en 1954.
A los 22 años, 36 juegos clase A, 12 goles, 1,69 metros y gran musculatura, Baby Popeye es un jugador técnico y potente, capaz de definir un duelo en una jugada aislada. El Bayern Múnich lo fichó del Basilea en 2012, para ser el sucesor de Franck Ribery a mediano plazo.
Pero antes del juego de ayer, el principal motor ofensivo helvético no había brillado. Con Ecuador, en la victoria suiza 2-1, estuvo muy desacertado en los disparos a portería y no tuvo un papel protagonista en el choque. Y en la derrota 5-2 ante Francia poco pudo hacer y se vio atiborrado como el resto del equipo por el aplanador equipo Bleu .
Pero ayer el suizo de raíces albaneses y kosovas, resurgió de las cenizas y dio muestras de su dinamismo y exquisita técnica para el gol.
La primera de sus tres conquistas cayó al minuto seis con un maravilloso disparo que entró por el ángulo superior. El hábil y veloz zurdo amplió la cuenta a los 31’ y 71’, con dos buenas definiciones.
“Estoy muy orgulloso del equipo, ya que sin el equipo no podría haber marcado tres veces. Es algo increíble marcar tres goles en un mundial. Y a ver qué pasa a partir de ahora. Estamos en octavos. Todo es posible”, señaló el héroe de la clasificación suiza tras este partido.
Por su lado, el seleccionador helvético, el alemán Ottmar Hitzfeld, resaltó: “Shaqiri tiene clase, instinto y calma con el balón. “Tres goles, es formidable y hay que felicitarlo. Ha demostrado de lo que es capaz. Ha confirmado todo su potencial”.
Xherdan Shaqiri vivió su primera experiencia en la Copa en Sudáfrica 2010, cuando jugó 13 minutos ante Honduras (0-0). Ahora, su explosión anotadora renació ante los catrachos, que le permite a Suiza afrontar con confianza la siguiente ronda ante Argentina, el próximo martes 1° de julio en São Paulo.