San José (Redacción). Maksim Manko nació en Ucrania el 11 de mayo de 1989, es naturalizado neozelandés, jugó en Argentina y el jueves, tras 30 horas de vuelo, se incorporó a Santos de Guápiles.
De 23 años, Manko es un delantero nativo de Kiev, la capital ucraniana, que a los 5 años fue llevado por su familia a Nueva Zelanda, país en el que el deporte favorito es el rugby, pero él se dedicó al futbol hasta militar en el Waitaker.
El artillero de 1.87 metros recaló en el 2011 en Argentina, donde se enroló en el equipo Dock Sud de la Primera C (Cuarta División).
En un buen español, gracias a su estancia en Argentina, ayer contó que mientras jugaba en ese país suramericano conoció un empresario, que fue el que lo contactó con los dirigentes santistas.
“Me siento muy en Costa Rica, los compañeros me han ayudado mucho. Vivo en una casa (que pertenece al equipo) con otros jugadores y todo está bien”.
Junto a Manko, a Santos llega el defensa central uruguayo Matías Callero, quien militó en el Danubio. También arriban los porteros Harry Ocampo (viene de Pérez Zeledón) y Bryan Morales (fue ascendido de la liga menor).