En la videollamada aparecen riendo y vacilando. Sylvain Demercastel, de Francia; Dirk Verbeuren, de Bélgica, y Andreas Kisser, de Brasil. Recuerdan anécdotas en una conversación curiosa: los tres, a pesar de haber nacido lejos de Centroamérica, están juntos en un proyecto para cuidar Costa Rica.
La música los unió desde hace muchos años y, aunque sus vidas han pasado sobre los escenarios de grandes festivales y conciertos, ahora tienen un propósito común: la conservación del medio ambiente.
Sylvain (que tocó en el grupo Artsonic), Dirk (quien es baterista de Megadeth) y Andreas (guitarrista de Sepultura) tienen en playa Tamarindo un hilo que los une. Este trío de artistas fundó Savage Lands, un proyecto para la conservación de este hermoso sitio de Santa Cruz, Guanacaste.
“Simplemente tenemos que hacer algo”, cuenta Sylvain, “y a los tres nos interesa que Costa Rica y la naturaleza del mundo esté bien”. El trío impulsa una campaña para ahorrar dinero y realizar refugios de vida silvestre y una reforestación de la zona.
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Unión metalera
Sylvain, de 50 años, nació en Francia, en el pueblo de Nanterre, al oeste de París, pero su futuro le esperaba en el calor del trópico.
Se formó como músico y fotógrafo, y tras “chivear” muchos años como guitarrista con el grupo Artsonic —renombrada agrupación de thrash metal francés—, quiso alejarse de la vida europea e irse, a finales de los noventa, a Hawái.
Buscó despreocuparse de los trajines de la ciudad y allí se fue a vivir con su padre y madre, donde todo parecía ir bien. Pero en 1997 vino a Costa Rica de visita: conoció Guanacaste y quedó flechado por su naturaleza, las playas y la “especial calma”, como él mismo describe, que se vive en suelo nacional.
Tras muchos años de tratar de persuadir a sus padres, logró convencerlos de venirse a vivir acá. Agarraron maletas y en el 2005 se fueron a vivir a playa Negra, en Guanacaste, donde siguen residiendo.
“Pero el paisaje ha ido cambiando mucho con el paso de los años”, cuenta el roquero.
Playa Negra queda a una media hora en carro de playa Tamarindo, uno de los sitios más “sexys” para el turismo, lo cual ha generado gentrificación. “El cambio es evidente con el paso de los años”, dice Sylvain.
La gentrificación es el proceso de renovación urbana que conduce a un cambio demográfico en un barrio o comunidad, con la llegada de una población más acomodada y, en sitios naturales como Tamarindo, la destrucción de la naturaleza para construir atractivos turísticos.
Las consecuencias de la gentrificación incluyen la expulsión de la población original, pues los residentes de bajos ingresos son desplazados debido a la subida de precios y a la falta de vivienda asequible.
También hay un cambio social porque las comunidades adquieren una nueva composición demográfica y cultural. Además hay una pérdida de la identidad y la historia del barrio y un aumento de la desigualdad socioeconómica.
Tamarindo se ha convertido en uno de los sitios más “apetecibles” para la gentrificación por su perfecto clima y bellezas naturales. A medida que hay más hoteles, hosteles y comercios para atender la demanda de los turistas, la naturaleza ha ido perdiendo terreno.
Hoy Tamarindo es uno de los destinos de entretenimiento más buscados por los visitantes extranjeros en nuestro país y sede de masivos eventos de atletismo (hay carreras anuales programadas allí) y festivales de música (entre diciembre y enero se realizaron, por ejemplo, el Tama Fest y el Festival BPM). Esta creciente actividad comercial sin duda ha traído beneficios a la zona pero también preocupaciones.
Sylvain, el metalero francés que se radicó ahí, se unió a organizaciones no gubernamentales como The Clean Wave para asear la playa y recoger desechos que quedan tras las olas de turistas, pero aún así se requería un esfuerzo más grande.
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Así fue como ideó crear Savage Lands.
El proyecto consiste en recaudar dinero para la compra de tierras que se convertirán en refugios para la vida silvestre, así como en espacios para la reforestación y conservación en zonas de gran vulnerabilidad debido al acelerado desarrollo inmobiliario.
A Sylvain se le ha unido en la causa el belga Dirk Verbeuren, quien fue su compañero en la banda Artsonic en la década de los años 90, pero que desde el 2016 es mejor conocido por ser el baterista de Megadeth, la legendaria banda estadounidense fundada por el no menos emblemático Dave Mustaine.
Sylvain y Dirk mantienen una gran relación desde sus años en Artsonic y el guitarrista pensó que sería una buena idea involucrar a su amigo, hoy un grande de la escena metalera, en el proyecto conservacionista.
“Costa Rica es un gran paraíso natural, pero la fiebre inmobiliaria está trayendo nuevos desafíos para aquellos que quieren preservar la biodiversidad. Creemos que el bosque es un tema central ya que se conecta con todo los demás. También queremos educar a todos los actores de nuestras comunidades para preservar las áreas boscosas”, asegura Sylvain.
Primera mancuerna
Nacido en Amberes, Bélgica, en 1975, Dirk Verbeuren es considerado un prodigio de la batería.
De Bélgica se mudó a Francia, en los noventa, donde estudió en la Music Academy International de la ciudad de Nancy. Allí conoció a Sylvain, por allí de 1995, y formaron el grupo Artsonic junto al bajista Boris Choquet y al guitarrista Stephane Robineau.
Entre chivos y metal viajaron por toda Europa, lanzaron dos álbumes juntos y, sobre todo, cosecharon una amistad que ya suma más de tres décadas.
Después de ArtSonic, Verbeuren se volvió un baterista muy solicitado. El grupo desapareció y Verbeuren siguió su carrera por aparte.
En el 2005, Verbeuren se unió a Soilwork, una banda de death metal melódico nacida en Suecia. Allí logró más notoriedad y trabajó con grandes artistas de esa esfera como Devin Townsend, Fredrik Thordendal, Satyricon, Jeff Loomis y Warrel Dane.
Muchos años después, en el 2016, Megadeth sufrió la baja de su baterista Shawn Drover, quien anunció en un comunicado que se separaría de la banda. Entonces se abrieron audiciones para buscar un nuevo talento y Verbeuren creýó que era su momento.
Audicionó y lo logró: Dave Mustaine, cantante y líder de la popular agrupación, anunció oficialmente a Dirk Verbeuren como el nuevo baterista de Megadeth. Desde entonces, su vida cambió y el hecho de tener una plataforma que podría resonar en el planeta entero lo hizo pensar en cómo podía aportar a buenas causas.
“Uno tiene una gran responsabilidad. Lo que dices no sabes hasta qué lugar podría ser escuchado y cómo podría cambiar cosas”, cuenta Dirk Verbeuren. “Si uno puede sumarse a una causa como esta, sin dudar hay que hacerlo”.
Dirk y Sylvain decidieron actuar por el medio ambiente con la creación de Savage Lands. Para el baterista, la naturaleza de Costa Rica (que ha conocido en varios viajes turísticos) es una joya absoluta.
Así fue como idearon una estrategia para generar un fondo para crear refugios naturales. A ambos se les ocurrió que podían hacer una rifa donde cada persona puede donar un monto y participar por una guitarra autografiada por ellos y concursar por el sorteo de entradas para el prestigioso HellFest, un festival de música metal en Francia donde este 2023 se presentarán artistas como Kiss, Iron Maiden, Pantera, Def Leppard, Slipknot, Mötley Crüe y Porcupine Tree.
“Pero lo importante es la causa”, retoma Verbeuren.
La iniciativa ambiental se llama “La Lotería de los Árboles” y se venderán números hasta el 15 de febrero de 2023 para recoger fondos para la causa ecológica.
“Nos preocupa que los árboles, que absorben dióxido de carbono y emiten oxígeno,sean talados a un ritmo sin precedentes. Las áreas deforestadas son una preocupación global y otros países han sufrido a causa de esto. No queremos que eso suceda en Costa Rica”, explica el baterista.
La tercera voz
Es habitual que Verbeuren, como baterista de Megadeth, se topa en festivales de música a Andreas Kisser, quien es reconocido como el virtuoso guitarrista de Sepultura, banda brasileña de heavy metal.
Andreas, de 55 años, ha aparecido en todos los lanzamientos de Sepultura desde su segundo álbum, Schizophrenia.
Además, ha estado involucrado en otras bandas como el supergrupo de rock Hail!, Sexoturica y, más recientemente en la agrupación De La Tierra, la cual formó con cuatro grandes de la música latina como lo son Alex González de Maná, Andrés Giménez de D-Mente y A.N.I.M.A.L,. y Sr. Flavio de Los Fabulosos Cadillacs.
A lo largo de su carrera, Andreas ha sido un vocero de la conversación del ambiente. En entrevistas siempre ha sido tajante en su preocupación por el bosque de la Amazonia, el pulmón del planeta talado e invadido por intereses económicos y políticos.
“Desde que yo tengo memoria, se habla sobre cuidados del medio ambiente, pero a mucha gente de poder no le importa”, afirma Andreas, sin pelos en la lengua.
Para él, es importante usar la música como mecanismo para sacudir a las personas con respecto a este tema. Un gran ejemplo al respecto fue cuando Sepultura lanzó la canción Guardians of the Earth, acompañada de un videoclip que tenía imágenes exclusivas proveídas por Amazon Frontlines sobre las amenazas que provocaba la industria de extracción natural.
“En Sepultura siempre hemos usado la música para hacer a la gente consciente de lo que pasa en el mundo”, dice el brasileño.
“Nosotros (los tres) no somos politicos, no somos activistas per sé. Solo soy un músico que tiene el privilegio de hablarle a grandes públicos y decirle a la gente que puede luchar por sus tierras. Para mí, nuestra mision como músicos es hablar más allá de sexo, drogas y rock and roll”, afirma.
Verbeuren y Andreas se hicieron muy amigos en el último lustro, tras compartir bambalinas en distintos escenarios, uno de ellos el HellFest. Sabiendo que el brasileño está interesado en la conservación, Verbeuren le propuso a Sylvain que formaran un tridente para la causa en Costa Rica.
Por supuesto, Andreas no dudó en unírseles.
“A mí me preocupa lo normalizado que está la destrucción del ambiente”, dice el guitarrista brasileño y pone el ejemplo de las piñas emplasticadas y cortadas que hay en los supermercados.
“Ya no vemos la fruta como tal. No puedes tocarla. Yo creo que muchos niños podrían creer que las piñas crecen en los malditos supermercados (risas) porque no tienen esa experiencia, ese contacto con la naturaleza. Ahora imaginate, ¿qué pasaría si nuestras playas y bosques son despellejados?”, reflexiona.
Por supuesto, unir a tres músicos, sin importar la causa que sea, solo podría terminar en un resultado: producir juntos.
Desde que Sylvain les propuso la iniciativa, en el 2022, Verbeuren sugirió que hicieran una canción que sirviera como “himno” para abanderar la causa.
“De eso no te podemos contar mucho”, confiesa el baterista en la conversación, entre risas. “Estamos planeando algo muy lindo que incluya sonidos propios de la naturaleza de la playa de Tamarindo y de los bosques de Costa Rica. Sonidos de animales y demás. Es un proyecto muy hermoso”.
Andreas bromea con que fue su exigencia para ser parte del proyecto. “Todo se trata de la música, por supuesto”, agrega, “porque al final del día la música es el mejor modo de llegarle a la gente. Nos conecta, nos hace sentir cosas. Sin dudas no podemos hacer esto sin una canción que acompañe todo este esfuerzo”.
Sea parte del proyecto
Para contribuir con esta causa, puede conseguir los boletos para la “Lotería de los Árboles” en el sitio web pages.gotombola.co Un billete cuesta €15 euros y se pueden conseguir hasta 50 tiquetes por €750.
Entre los premios que se darán en la lotería está una guitarra hecha por Sacha Dunable, integrante de la banda Intronaut y un famoso luthier californiano. También se rifará otra guitarra que está firmada por miembros de grupos como Gojira, Megadeth, Loudblast y Sepultura.
Aparte de las guitarras, se concursará por entradas para el Hellfest 2023 que se realizará en Clisson, Francia, del 15 al 18 de junio del 2023, donde se presentarán grandes agrupaciones como Kiss, Iron Maiden y Pantera, entre otras. Hay tiempo para participar hasta el 15 de febrero.