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El glamping, en palabras sencillas, es un concepto de turismo que nace de mezclar las palabras glamour y acampar (camping). En esta modalidad de hacer turismo, las personas disfrutan el placer de estar lo más cerca de la naturaleza sin sacrificar las comodidades de un buen hotel.
Así como hay opciones de glamping que están más cerca del concepto de acampar, hay otras que más bien son puro glamour en medio del bosque. No solo ofrecen lujosas instalaciones, sino que también incluyen amenidades que ni los sueños más salvajes de un campista pudieran imaginar.
Una de estas opciones es el hotel Chira Glamping, ubicado en Monteverde, que cuenta con cinco habitaciones en medio del bosque nuboso.
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Diego Valverde, propietario del hotel, explicó que comenzaron con esta opción de hospedaje en el año 2016, con solo dos habitaciones y como parte de un concepto innovador que se ha venido actualizando con el tiempo.
“Todas las habitaciones tienen cocina equipada y baño privado. La opción familiar está tematizada para parejas con niños, entonces tiene hamacas y pared para escalar. Básicamente se les ofrece la comodidad bajo un concepto de acampar, tenemos muchas amenidades, incluido un mini bar”, destacó Valverde.
En la habitación familiar caben un máximo de cinco personas, mientras que las otras cuatro habitaciones son para parejas, de las cuales dos se ubican en la categoría de luna de miel pues tienen como adicional un jacuzzi.
“El concepto del hotel nació porque mucha gente quería experimentar un contacto directo con la naturaleza pero no quería perder las comodidades que tienen un hotel”, detalló Valverde.
Las habitaciones tienen forma de domo, lo que la hace más grande y más robusta que una tienda de acampar. Cada habitación cuenta con un deck y cocina y baño privado. El precio de las habitaciones empieza en $290 por noche más impuestos y llega hasta $420 por noche más impuestos, en el caso de la familiar. Si desea más información puede llamar al 8456-1022 o escribir a chirahotel@gmail.com.
Según resaltó Valverde, Chira Glamping es un negocio en el que cada habitación es completamente independiente. Además, ofrece la ventaja de que están en el bosque pero muy cerca del centro del pueblo.
“Estamos ubicados en Cerro Plano, a unos 800 metros del centro, pero en una propiedad privada con bosque. Además ofrecemos un restaurante que está dentro de la misma propiedad y que es un concepto que va muy bien con el glamping, con un menú de degustación de siete tiempos en la copa de los árboles”, afirmó.
El restaurante de la propiedad, llamado San Lucas, cuenta con un menú preparado por el reconocido chef Santiago Fernández Benedetto. Eso sí, se necesita reservación para degustar lo que promete ser toda una experiencia gastronómica.
“El restaurante está abierto a todo el público, únicamente abrimos para la cena y se necesita reservación. No tenemos carta, lo que ofrecemos es una experiencia gastronómica con un único menú de degustación de siete tiempos a un precio fijo. Hay dos turnos, uno a las 5 p. m. y otro a las 8:30 p. m. y la experiencia dura apróximadamente dos horas”, explicó Valverde.
El menú está inspirado en Monteverde y la idea es contar una historia, en la que cada uno de los siete platos aporta al relato. “Es un menú de degustación con opciones para veganos, vegetarianos y pescetarianos. Es toda una experiencia porque hasta hacemos hasta un acertijo y hay una sorpresa”, añadió el dueño.
El precio de la cena es de $80 más impuestos para adultos y las bebidas son aparte, mientras que para menores de 12 años el costo es de $30 más impuestos para un menú de tres tiempos.
Lujo en el Sur
Otra opción de glamping corresponde al hotel Art Villas, ubicado en playa Hermosa, en Dominical de Osa. Se distingue por su habitaciones conocidas como Coco, que es una versión glamurosa de las conocidas casas de árbol pero con todas las comodidades.
“La propiedad Art Villas cuenta con dos villas grandes. Hay una que es para diez personas y un atelier, o estudio, para seis huéspedes máximo. Aparte de eso tenemos las cuatro unidades de bungalows o Coco. No incluimos alimentación, pero cualquier persona ya sea en las villas o en los Cocos, puede contratar el servicio de chef en la casa donde pueden seleccionar entre las opciones de un menú preseleccionado”, explicó Joseph Fernández, gerente general.
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Sin embargo, la mayoría de visitantes les gusta el concepto de acampar, lo cual incluye hacer su propia comida. El Coco más grande cuenta con una cocina compartida para las cuatro unidades de esa categoría, la cual incluye sartenes, ollas, refrigeradora y más. Cada Coco tiene un minibar, un trampolín a nivel del suelo y una piscina con un tobogán para mantener el concepto de aventura.
Si desea visitar el hotel Art Villas puede reservar por medio del sitio artvillas.com, donde podrá conocer los precios, o bien escribir a info@artvillas.com. La aventura y el glamour los esperan.
