Nadie perteneciente al mundo de YouTube quedó indiferente cuando El Rubius, uno de los mayores exponentes de la plataforma de videos anunció que se iba de España para mudarse a Andorra y repensar qué haría con su carrera de estrella web.
Aunque dijo que muchos de sus amigos habían migrado hacia el Principado europeo, pocos le creyeron: evadir las altas cargas de impuestos de su país parecía ser la razón.
Ser creador de contenido es un negocio y eso está más que claro a esta altura del partido. Y, si de ese negocio hay que hacer crecer las cuentas, cada vez YouTube resulta menos rentable. Al huir de España, El Rubius también huyó de la plataforma roja para establecerse por más tiempo en Twitch, el sitio de streaming que cada día desangra más al gigante de Google.
Twitch, que pertenece hoy al gigante Amazon, ha dado un batacazo a quien parecía inderrotable. Su interfaz amigable, su variedad de temas y su fácil manera de crear monetización para los creadores de contenido le ha facilitado la vida a millones de usuarios en todo el planeta. Twitch se mira como el futuro no solo de la guerra del streaming, sino también de la televisión (por ejemplo, no voy a mentir, pocas veces almuerzo viendo el televisor, en cambio lo hago viendo un canal en esta plataforma desde la comodidad de mi celular).
Aún así, El Rubius ha mantenido (aunque sea en pequeñas dosis) su producción en YouTube. No ha sido tan radical como otros que sí han migrado por completo a Twitch, como es el caso del popular AuronPlay.
Este creador, que se hizo famoso por sus anécdotas, bromas telefónicas, críticas a otros videos de YouTube y chistes en su mayoría del tiempo, ha sido el emblema de lo que muchos llaman como “una crónica de la muerte del youtuber”.
“Yo creo que es evidente (que está cansado de YouTube). No hay que ser muy listo para ver que mi etapa en YouTube al día de hoy terminó. Porque ya han pasado años, estoy hasta la polla de YouTube, estoy hasta los huevos de grabar videos, con lo cual ahora hago lo que a mi me gusta”, ha dicho AuronPlay sobre su migración a Twitch.
Los tiempos (y una pandemia de por medio) nos han cambiado como consumidores y, si se puede generar dinero con menos esfuerzo —ahorrándose por ejemplo el tiempo invertido en posproducción de un video para YouTube—, ¿por qué no hacerlo?.
LEA MÁS: ¿Un tuit puede ser considerado arte?
Una realidad que nadie vio venir
Para comprender las dimensiones de ganancia de Twitch hay que ser directo, pues los números crudos hablan por sí solos.
Para mediados de octubre, en lo más alto del top de España, Auronplay contaba con ganancias de $3 millones, seguido por Ibai con $2,3 millones. En tercer lugar estaba El Rubius, que registró $1,8 millones y de cuarto TheGref, con $1,3 millones. Todo esto sabido gracias a una filtración.
¿Cómo es posible que se generen estos números?
Según los datos del informe de Streamlabs y Stram Hatchet, Twitch finaliza este 2021 aglutinando el 70,5% de las horas de visualización de los vídeos globales. Como si se pusiera un clavo en el ataúd de YouTube, la plataforma Facebook Gaming (un apartado de la red social) ha superado en horas de visualización a los canales de youtubers.
Twitch es una oferta refrescante que el gigante Google no vio venir. Nació como una plataforma específica de la comunidad gamer de forma independiente. En el 2014 la plataforma fue comprada por Amazon, pero eso no cambió la dinámica principal: registrarse y ver los vídeos es totalmente gratuito, además de que emitir es gratis para cualquiera que quiera hacerlo.
¡Y hay selecciones para todos! A diferencia de YouTube, Twitch dispone de categorías para temáticas. Hay para “solo hablar”, hay para juegos de mesa, hay para darle seguimiento a cada videojuego: uno puede elegir Fortnite, Super Smash Bros., The Last of Us... Lo que sea, pero de una forma más organizada y con mayor facilidad para encontrar cuentas afines.
Además, su interfaz es más amigable, más interactiva... YouTube permite emitir en directo, pero nunca fue pensado para eso sino para la posproducción y, en un mundo cada vez más acelerado, eso afecta lo principal para los creadores de contenido: el dinero.
LEA MÁS: Cowboy Bebop: razones por las que fracasó el live-action de Netflix
Quien haya intentado monetizar en YouTube sabe que es una tarea titánica. La plataforma pide cientos de seguidores y millones de vistas para lograr un par de dólares... Aumentar el rango del canal es una verdadera pesadilla si se empieza desde cero. Por ejemplo, un contacto cercano que ya cerró su canal, tardó más de 5 años para monetizar siete dólares mensuales. Es una inversión poco rentable, tomando en cuenta las horas de edición de video, la compra de un micrófono y una cámara decente, etc.
Twitch vino a aliviar ese problema: si a un usuario le gusta tu contenido, ¡PUM! Tiene una casilla donde puede darte una donación y listo. Podés tener veinte seguidores y con eso ganar mucho más que lo que harías en años de YouTube, sin tener que gastar un solo segundo editando videos sino solo transmitiendo en directo.
“Yo creo que es evidente (que está cansado de YouTube). No hay que ser muy listo para ver que mi etapa en YouTube a día de hoy terminó. Porque ya han pasado años, estoy hasta la polla de YouTube, estoy hasta los huevos de grabar videos, con lo cual ahora hago lo que a mi me gusta”
— AuronPlay, streamer
Twitch, además de permitir anunciantes en sus videos, tiene su sistema de suscripciones para apoyar al canal. En un botón la persona elige cuánto quiere donar y listo: solo basta cliquear dos veces. Es decir, en en esta plataforma, la fidelidad te paga. Se trata de una fidelidad que incluso pueden mantener por meses, pues el mecenas elige si te apoya por un mes, tres meses o un año.
En el caso de Auronplay las suscripciones comienzan en los ₡1.900, con el derecho a acceder a retransmisiones y salas exclusivas en que solo suscriptores pueden chatear. Además, de entrada, la suscripción te ofrece 64 emoticonos personalizados que solo los mecenas puedan utilizar (así la persona puede distinguirse del resto de “mortales” que están viendo los videos gratis).
¿Cómo se distribuye ese dinero? Pues depende de los acuerdos entre el creador y la plataforma. Usualmente se trata de un acuerdo de 50/50, pero no sería de extrañar que, ante alguien como AuronPlay (que le factura tanto a la compañía), el acuerdo sea de 70/30.
Otro gran ejemplo que sorprende en Twicht es Ibai Llanos, quien para muchos desbanca el esfuerzo de los medios de comunicación por cubrir actualidad. El mayor ejemplo fue la entrevista que le realizó al futbolista Lionel Messi tras fichar por el Paris Saint Germain. Muchos gigantes deportivos, como Fox y ESPN, fueron tras el astro argentino pero para sorpresa de todos fue el ‘streamer’ quien logró atraparlo y conversar sobre su cambio de club.
“Antes Messi había dado una conferencia donde las principales cadenas del mundo tenían hasta tres preguntas. Bueno, Ibai llegó casi a diez”, reseñó ESPN sobre lo sucedido.
LEA MÁS: Ibai Llanos, el ‘streamer’ que “le ganó la vuelta” a la prensa deportiva y llevó a Messi a Twitch
Ibai empezó su trabajo en la Liga de Videojuegos Profesional de España para comentar juegos como League of Legends. Siguió abriéndose camino y, en plena pandemia, con todos encerrados en sus casas, aprovechó para transmitir constantemente e impulsarse en la red como uno de los grandes exponentes de Twitch, pues estaba dedicado plenamente a la plataforma.
Un caso distinto es el de los youtubers de mediano alcance, quienes suelen utilizar técnicas híbridas, ya que su facturación no es tan colosal. Por ejemplo, streamers españoles como Quetzal o Dayo, quienes están más volcados hacia el periodismo y el ensayo sobre cine y videojuegos, suelen realizar sus transmisiones por Twitch y posteriormente suben algunos de los streams a sus canales en YouTube, para aprovechar sus horas invertidas y ver cómo el algoritmo de Google puede ayudarlos.
Esta es una práctica cada vez menor y que, tarde o temprano, caducará: cada segundo cuenta; cada centavo también.
Los streamers pueden ganar más dinero en Twitch con menos seguidores, ya que cuenta con alternativas como las suscripciones y donaciones.
¿Una vuelta atrás?
Muchas veces solo el romance y la nostalgia pueden cambiar la opinión de alguien.
AuronPlay pasa por su mejor momento: está entre los streamers que más ganan en Twitch del mundo. Día tras día se coloca como el streamer español más visto y, además, suele estar en el top 3 global de la plataforma. Basta entrar a alguno de sus directos y ver cómo sus chats son una ametralladora incesante de comentarios; siempre hay gente mirándolo.
Es difícil pensar que quisiera volver al mundo de YouTube y, aunque de seguro desde hace mucho tiempo había contratado a alguien para que editase sus videos, todo parece indicar que esa dinámica le parece rancia.
Aún así, en una reciente transmisión, AuronPlay dejó una pequeña ventana abierta. ¿Qué pasaría cuando ya tenga todo el dinero que pueda tener?
“Puede que regrese a YouTube un par de años para retirarme”, dijo, como si se tratara de un veterano jugador de fútbol que regresa al club que lo vio nacer.
En dado caso, nada cambiaría el destino manifiesto al que parece enfrentarse YouTube. ¿Mejorará su interfaz de transmisiones o buscará alguna forma de sorprendernos? El rodeo del mundo de videojuegos (que tanto ha despojado al cine de su zeitgeist) parece estar domado por Twitch. Solo otro fenómeno inesperado podría cambiar el funesto final que parece depararle.