El contorno de los ojos es una de las áreas más delicadas y expresivas de nuestro rostro. Y, con frecuencia, es la primera zona en mostrar signos de envejecimiento, fatiga y estrés, lo que puede afectar su apariencia general. Es por esa razón que es fundamental prestar atención a su cuidado.
En este artículo, la médico general y especialista en estética de la piel, Carolina Murillo, habla de esas características únicas de esta zona del rostro, sus principales amenazas y recomendaciones para mantenerla saludable.
Para empezar hay que conocer sus características
La piel que rodea los ojos es significativamente más fina y sensible que la del resto del rostro. Algunas de sus características son:
Grosor: esta piel tiene un grosor de aproximadamente 0.5 mm, en comparación con 1.5 mm en el resto del rostro, lo que la hace más susceptible a daños.
Falta de glándulas sebáceas: esta área carece de glándulas sebáceas, lo que significa que no produce aceites naturales que ayudan a mantener la hidratación. Como resultado, la piel puede secarse con mayor facilidad.
Menor elasticidad: con el tiempo, la producción de colágeno y elastina disminuye, lo que provoca que esta piel se vuelva más propensa a arrugas y flacidez.
Mayor fragilidad: la piel del contorno de los ojos es más propensa a irritaciones y reacciones alérgicas debido a su delicadeza.
Las principales amenazas
La piel del contorno de los ojos es vulnerable a los daños causados por la radiación UV. La exposición sin protección puede provocar manchas, arrugas prematuras y pérdida de firmeza.
Ignorar la hidratación en esta zona puede llevar a sequedad, líneas finas y ojeras. Muchas personas pasan por alto la necesidad de utilizar cremas específicas para el contorno de ojos.
Aplicar productos para el rostro en el contorno de los ojos puede resultar en irritaciones. La mayoría de los productos faciales son demasiado agresivos para esta delicada zona.
La piel alrededor de los ojos es muy sensible. Frotar o tirar de la piel al aplicar productos puede causar daño y acelerar el envejecimiento.
La falta de sueño contribuye a la aparición de ojeras y bolsas. Un sueño inadecuado también afecta la regeneración celular de la piel.
Para un contorno de ojos saludable
“Ahora que hemos identificado las características y amenazas del contorno de los ojos, aquí hay algunas recomendaciones para mantener esta área en óptimas condiciones”, agregó la Dra. Carolina Murillo, quien facilita una lista de recomendaciones.
Aplique un protector solar específico para la zona de los ojos cada día, incluso en días nublados. Busque productos que contengan ingredientes como óxido de zinc o dióxido de titanio para una protección efectiva.
Elija una crema que esté formulada específicamente para esta área. Busque ingredientes como ácido hialurónico, péptidos y antioxidantes que ayuden a hidratar, reducir arrugas y mejorar la elasticidad.
Aplique una pequeña cantidad de crema o gel en el contorno de los ojos utilizando el dedo anular, que tiene la presión más suave. Esto ayudará a prevenir la sequedad sin causar irritaciones.
Asegúrese de dormir lo suficiente, mantenerse hidratado y seguir una dieta equilibrada rica en frutas y verduras. Estos hábitos ayudarán a mantener la piel saludable y radiante.
Evite frotar o estirar la piel al aplicar productos. Utilice movimientos suaves y circulares para estimular la circulación sin causar daño.
Si tiene preocupaciones particulares, como bolsas o arrugas pronunciadas, considere consultar a un dermatólogo para explorar opciones como ácido hialurónico o tratamientos láser.
El maquillaje pesado puede acentuar las líneas finas. Si decide usarlo, opte por fórmulas ligeras y asegúrese de desmaquillarse completamente antes de acostarse.
“Cuidar el contorno de los ojos es esencial para mantener una apariencia juvenil y saludable. Al entender las características únicas de esta zona y ser consciente de las amenazas y errores comunes, podrá implementar estrategias efectivas para mantener su piel en óptimas condiciones. Recuerde que, al igual que cualquier otro aspecto del cuidado personal, la consistencia y la atención son clave para lograr resultados a largo plazo”, concluyó la especialista Carolina Murillo.