Para muchos la llegada de la Navidad es sinónimo de fiestas, felicidad, dar regalos y compartir con los seres queridos; sin embargo, para otros la llegada del fin de año puede representar un escenario completamente distinto. Factores asociados con la frustración, sensación de soledad y tristeza pueden llevar a las personas a padecer de lo que se conoce como la depresión navideña o de temporada.
Como su nombre lo indica, es un estado que llega y permanece únicamente dentro del período de las fiestas de fin de año y su aparición se puede ver justificada con la sensación de no encajar emocionalmente con el espíritu de la época, metas sin concluir, la falta de un familiar o por la ruptura de una relación amorosa, entre otras.
Sin embargo, aunque se trata de un estado pasajero, los especialistas recomiendan levantar las alertas y estar atentos a la aparición de los síntomas para evitar que la situación se convierta en un caso más severo. Esto sobre todo porque para este año se suman otro tipo de causas ligadas a la pandemia por Covid-19 que podrían llevar a más costarricenses a pasar por este malestar.
De acuerdo con la última encuesta continua de empleo desarrollada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) más de 1,3 millones de costarricenses han reportado afectaciones en sus trabajos relacionadas directamente con la pandemia; mientras que el Colegio de Profesionales en Psicología atendió 4.090 llamadas entre el 04 de mayo y el 31 de octubre de este año debido a la coyuntura, siendo los principales motivos la ansiedad, depresión y problemas de comportamiento en niños.
De acuerdo con Fernando Mena, psicólogo de la Universidad Latina de Costa Rica, el 2020 sin duda ha sido un año complicado y el cambio de normalidad, el tener que pasar la Navidad de manera virtual, el haber perdido el trabajo o sufrido un rebajo de los ingresos, así como el haber pasado por el fallecimiento de un familiar, son razones que pueden llevar a muchas personas a sentirse decaído para las fiestas y padecer la depresión navideña.
Preste atención a los síntomas
Según explica Mena, es normal sentirse triste o sin energía, pero si los síntomas se agravan o persisten por 15 días es importante buscar ayuda o acudir a un especialista, ya que la depresión es un padecimiento que puede tratarse y curarse. Es importante el que tal condición no se convierta en un mal crónico y recurrente.
Aunque este padecimiento es más común en adultos, también puede presentarse en niños. En esta población los síntomas a reconocer, son un tanto diferentes y podrán incluir llanto fácil, rabietas, tristeza, enojo injustificado, cambios de sueño o de alimentación.
Como una forma de enfrentar la tristeza, el especialista recomienda realizar actividades que promuevan una actitud y actividad mental positiva, ya que lo que se busca es modificar la química cerebral en cuanto a sus neurotransmisores y que proporcionarán mayor sensación de plenitud y bienestar. Esto incluye ejercitarse, dormir bien, mantener un pensamiento positivo, bailar, reír y practicar los hobbies.