Durante el embarazo, es común escuchar a las futuras madres hablar de antojos por alimentos específicos. Desde chocolates hasta combinaciones inusuales como pepinillos con helado, estos antojos pueden parecer extraños o incluso divertidos. Pero, ¿qué hay detrás de estos deseos repentinos por ciertos alimentos? ¿Son los antojos del embarazo un mito o una realidad? En este artículo, exploraremos las causas científicas de los antojos y ofrecemos algunas recomendaciones para manejarlos de manera saludable.
¿Por qué ocurren los antojos?
“Los antojos durante el embarazo son una experiencia muy real para muchas mujeres. Aunque no todas las futuras madres los experimentan. Las razones detrás de estos antojos pueden ser variadas y complejas, según la ginecóloga Camila Segura la ciencia ofrece algunas explicaciones.
- Hormonas. Durante el embarazo, los niveles hormonales fluctúan significativamente. Estas hormonas, especialmente la progesterona y los estrógenos, pueden influir en el sentido del gusto y el olfato, haciendo que ciertos alimentos sean más atractivos o repulsivos.
- Necesidades nutricionales: El cuerpo de una mujer embarazada necesita más nutrientes para apoyar el crecimiento y desarrollo del bebé. Los antojos pueden ser una forma en la que el cuerpo intenta comunicar sus necesidades. Por ejemplo, un deseo repentino de carnes rojas podría estar relacionado con una necesidad de proteínas o hierro.
- Cambios en el metabolismo: Todo cambia durante el embarazo, lo que puede afectar los niveles de azúcar en la sangre y llevar a antojos de alimentos ricos en carbohidratos o azúcares.
- Factores sicológicos: El embarazo es un tiempo de grandes cambios emocionales y físicos. Los antojos pueden ser una forma de confort emocional, proporcionando una sensación de bienestar o satisfacción en medio de estos cambios.
Recomendaciones
Escuche a su cuerpo: Si siente un antojo, trate de entender si se trata de una necesidad nutricional. Asegúrese de que su dieta sea equilibrada y rica en los nutrientes esenciales necesarios durante el embarazo.
Mantenga una dieta saludable: Intente satisfacer sus antojos de manera saludable. Si tiene antojos de alimentos dulces, opte por frutas frescas. Si desea algo salado, elija frutos secos sin sal en lugar de opciones menos saludables.
No se sienta culpable: Es normal tener antojos. Si ocasionalmente cede a un antojo menos saludable, no se sienta culpable. La moderación es clave. Permítase disfrutar de sus antojos de vez en cuando, pero trate de mantener el equilibrio en su dieta general.
Hable con su médico: Si tiene antojos inusuales o muy intensos, consulte a su médico. En algunos casos, los antojos pueden ser una señal de que su cuerpo necesita algo específico. Su médico puede ayudarle a identificar y satisfacer estas necesidades de manera saludable.
Hidratación adecuada: A veces, los antojos pueden ser una señal de deshidratación. Asegúrese de beber suficiente agua a lo largo del día para mantenerse bien hidratada.
Antojos en pareja
Los antojos durante el embarazo no solo afectan a la mujer embarazada, sino que también pueden impactar a su pareja y a la dinámica familiar. Al reconocer este impacto y trabajar juntos para manejar los antojos de manera saludable, las parejas pueden fortalecer su vínculo y asegurar que tanto la madre como el bebé reciban el apoyo y la nutrición que necesitan. La comunicación abierta, la planificación conjunta y el apoyo emocional son esenciales para navegar esta etapa del embarazo de manera armoniosa y saludable.
En algunos casos, las parejas pueden experimentar lo que se conoce como “antojos por empatía”, donde empiezan a desear y consumir los mismos alimentos que la mujer embarazada. Este fenómeno puede ser una forma de empatía y conexión emocional.
Además, algunas parejas se encuentran involucradas en los antojos de la mujer embarazada. Esto puede significar hacer viajes nocturnos para conseguir un alimento específico o preparar comidas que satisfagan esos deseos. Esta participación puede fortalecer la conexión emocional y el apoyo mutuo, pero también puede ser una fuente de estrés si los antojos son frecuentes o difíciles de satisfacer.
Para muchos novios y esposos, ver a su pareja experimentar antojos intensos puede ser desconcertante y, a veces, divertido. Sin embargo, también puede generar preocupación sobre si los antojos están siendo satisfechos de manera saludable y si el bienestar de la madre y el bebé está siendo atendido adecuadamente.