Las palabras “desintoxicación” y “detox” están de moda, sin embargo, la mejor dieta detox que existe es comer sano y equilibrado... el cuerpo se encarga del resto.
Nuestro organismo es una máquina perfecta que tiene diversos órganos que trabajan en la eliminación de toxinas, así que no se deje engañar por la mercadotecnia y publicidad.
Cuerpo: máquina perfecta
La nutricionista Melissa Ureña explica que el cuerpo humano naturalmente tiende al equilibrio, a preservar la salud y mantener la vida. Cada una de nuestras células participa de este proceso, que en la ciencia se conoce como homeostasis.
Devolvámonos un momento al colegio: la homeostasis es una propiedad de los organismos que consiste en su capacidad de mantener una condición interna estable compensando los cambios en su entorno mediante el intercambio regulado de materia y energía con el exterior.
Teniendo esto claro, repasemos cuáles órganos de nuestro cuerpo son los encargados de hacer el famoso detox:
- Hígado: Una de las funciones de este órgano es filtrar y eliminar las toxinas provenientes de lo que consumimos, por ejemplo, alcohol y medicamentos. Cuando la sangre llega a este órgano, elimina las toxinas regulando los niveles de sustancias químicas de la sangre. Los medicamentos, por ejemplo, se metabolizan a través del hígado para que nuestro cuerpo sea capaz de utilizarlos y eliminarlos. También segrega la bilis, una sustancia que ayuda a transportar los desechos para expulsarlos del organismo.
- Riñones: Los riñones eliminan los desechos y el exceso de líquido del cuerpo. Los riñones también eliminan el ácido que producen las células del cuerpo y mantienen un equilibrio saludable de agua, sales y minerales en la sangre.
- Pulmones: En estos órganos se realiza el intercambio gaseoso. Cuando exhalamos o botamos aire, los pulmones eliminan bióxido de carbono, que es un producto de desecho de las células.
- Intestino grueso: La principal función del intestino grueso consiste en eliminar el agua de la materia no digerida y formar los desechos sólidos. En él habitan microorganismos, conocidos como microbiota, cuyo balance es fundamental para lograr una buena eliminación de las sustancias tóxicas para el cuerpo. El desbalance de la microbiota o disbiosis puede provocar problemas como distensión abdominal, síndrome del intestino irritable o colitis. La calidad de la microbiota está directamente relacionada con el estilo de vida de cada persona.
- Piel: El órgano más grande del cuerpo humano también tiene un importante papel en la desintoxicación corporal. Cuando sudamos no solo botamos agua y sales minerales sino también toxinas.
La mejor dieta
Comer sano, colorido, equilibrado y sin excesos es la clave para ayudar a que cada órgano de nuestro cuerpo tenga un buen desempeño. La nutricionista Ureña nos brinda las siguientes claves para lograrlo:
- Preferir los alimentos frescos antes que aquellos muy procesados. Una excelente idea es inclinarse por hacer las compras en la feria del agricultor y darle prioridad a las frutas y vegetales.
- Identifique los alimentos procesados y manténgalos lejos de su despensa. Para ello, es importante que revise las etiquetas: si tienen más de 5 ingredientes es un alimento con alta cantidad de procesamiento; además, si al final de la lista de esos ingredientes los nombres suenan desconocidos significa que son aditivos químicos que suelen ser más retadores para el ser procesados por el cuerpo.
- Manténgase bien hidratada. El consumo de suficiente agua favorece la eliminación de toxinas.
- Incluya en su dieta alimentos ricos en antioxidantes como brócoli, té verde, uvas, tomates, ajo, canela y cacao.
- Asegúrese de que el plato sea bien colorido. Incluya frutas y vegetales de colores intensos (rojo, anaranjado, verde, morado, blanco, azul) pues los antioxidantes están relacionados al color, alimentación bien colorida.
- Consuma alimentos ricos en fibra: leguminosas, frutas, vegetales y cereales de grano entero. La fibra ayuda a atrapar sustancias que vamos a poder eliminar a través de las heces.
- Escuche su cuerpo, el sistema digestivo manda señales al cerebro cuando ya está saciado.
- No todos los cuerpos son iguales, para algunas personas hay alimentos de más difícil absorción mientras que otras no tienen ningún problema. Las carnes rojas, por ejemplo, tienen un proceso digestivo más complejo, mientras que las carnes blancas tienen menos tejido conectivo y se digieren más fácil; no obstante, esto no significa que hay que eliminar alguna comida del todo sino de escoger las opciones que reconocemos que a nuestro cuerpo le hace bien.
- Tenga presente que una buena dieta va acompañada de un estilo de vida saludable, por eso es importante que realice actividad física diaria.
- Dormir bien también es fundamental. Nuestro cuerpo trabaja por ciclos y mientras descansamos, los órganos realizan funciones de desintoxicación. De hecho, esta es la razón por la cual la primera orina del día suele estar muy concentrada pues contiene gran cantidad de toxinas.
- Finalmente, procure tener un peso saludable. Al subir de peso y acumular grasa en el sector del abdomen, se produce una condición llamada hígado graso, la cual impide que este órgano funcione correctamente y conlleva padecimientos como colesterol y triglicéridos altos.
Y si nos excedimos con la comida, ¿qué podemos hacer? Lo primero es no estresarse, porque el estrés es mal compañero. Lo segundo es aceptar que nos equivocamos y lo tercero: regresar a nuestra alimentación sana.
Debemos reconocer que en nuestra sociedad, las celebraciones siempre van acompañadas de comida y bebida… Así que si acaba de pasar fin de año, San Valentí o su cumpleaños, puede que se haya salido un poco de su plan de alimentación.
Eso no significa que se deba contener antes o después de una fecha significativa, pues los ciclos de compulsión y restricción pueden ser muy dañinos para el cuerpo. El organismo no entenderá que dejamos de comer porque ya casi llega el cumpleaños o porque acaba de pasar Navidad… él solo interpreta que hay escasez y su mecanismo de defensa será absorber tanta grasa como pueda.
Así que si tuvo un día de exceso, lo mejor es retomar la dieta saludable cuando antes, y por saludable nos referimos a equilibrada, sana y colorida.
Otra práctica común es darle propiedades milagrosas a las hierbas naturales o infusiones digestivas. Tomar té de menta, de manzanilla o té digestivo puede aliviar la sensación de llenura y tienen efecto antiinflamatorio; pero no son mágicas, no bajará de peso o borrará lo que consumió con un té. Su ingesta es positiva mas no milagrosa.
Recuerde: el proceso detox lo hace su cuerpo y usted le ayuda con decisiones inteligentes de alimentación y estilo de vida.
Fuente: Melissa Ureña, nutricionista y docente de nutrición de la U Latina