La medida sanitaria de quedarnos en casa no solo reduce el contagio del coronavirus; expertos concuerdan en que las nuevas dinámicas en el hogar han ayudado a tener mascotas más felices, en especial si se trata de perros.
El cambio real para los caninos se verá en las rutinas. Ellos tienen su propia dinámica cuando están en casa y, ahora que tienen a su propietario con ellos la mayor parte del tiempo, posiblemente la viven de manera un poco diferente.
El verdadero cambio lo sentirán aquellas mascotas acostumbradas a salir a caminar a diario.
Si bien al día de hoy no se ha demostrado científicamente que los animales puedan transmitir el coronavirus a las personas, es aconsejable limpiar sus patas una vez que entran en casa, ya que pueden esparcir bacterias.
Al respecto, Wendy Araya, médica veterinaria, advirtió que limpiar las patas de las mascotas con alcohol líquido o en gel puede generar quemaduras en las almohadillas. La forma correcta es lavarlas con agua y jabón.
Durante el paseo, evite que otras personas toquen a su perro, pues es una superficie de contacto para el patógeno.
Si sigue haciendo paseos diarios, lo ideal es que sean intensos y que incluyan más ejercicios y nuevas rutas, recomendó Max Miranda, etólogo propietario de PetMas.
Miranda aseguró que los cambios en las rutinas, por ejemplo, las horas de comida y para salir a hacer las necesidades, deben ser graduales. Estas modificaciones aplican también al tiempo de juego y a los horarios para compartir con el resto de la familia.
Hay que recordar que las nuevas dinámicas dependerán mucho del tamaño, la raza y hasta la edad del can. Lo ideal es que los perros se ejerciten y reciban sol todos los días.
Présteles atención. Los cachorros, por ejemplo, tienen mucha energía que hay que canalizar. Ser travieso puede ser señal de estrés; de que el animal necesita estar ocupado y gastar toda esa energía.
Por el contrario, los perros ancianos son más tranquilos y por algunas patologías no pueden ejercitarse mucho o jugar todo el día, especialmente con los niños, cuya compañía suelen disfrutar. Ellos necesitan más descanso.
Hay perros que, por su conformación anatómica (por ejemplo, los perros salchicha ) o alguna patología, tienen alteraciones óseas en cadera, rodillas o columna que los hacen vulnerables si se les somete a mucho esfuerzo o a ejercicio pesado.
Perros con este tipo de padecimiento deben evitar saltar en extremo o subir y bajar gradas; si se suben a camas o sillones es mejor utilizar rampas.
Actividades para mascota y amo
¡A jugar! En estos días la familia pasa más tiempo en casa, por lo que va a poder entretener a la mascotas de diversas formas.
Estimule el sentido del olfato de su perro al jugar. Este ejercicio ayudará a mantener el equilibrio mental del animal. Coloque pedacitos de premios o comida por la casa, arme caminos para que los siga o esconda las recompensas en algunos rincones para mantenerlo entretenido por más tiempo.
Pierda el miedo de tirarse al suelo o perseguir a su mascota; si el juego es intenso, puede inclusive equivaler a un rato de ejercicio.
Miranda también mencionó que en el mercado existen algunos juegos interactivos que se pueden cargar de comida para que la mascota se entretenga sacándola. ¡Puede pasar un buen rato tratando de averiguar por dónde sale el alimento!
Aproveche para enseñar nuevas habilidades. Puede adiestrar a su perro con comandos básicos como: sentado, tumbado y dar la patita. Siempre se debe premiar inmediatamente cada una de las acciones, para que el perro relacione el acto con el estímulo.
Practique doga. Este es un excelente momento para reforzar el vínculo con actividades como el doga, una disciplina creada por y para los perros. Doga es la unión de dos palabras: dog (perro en inglés) y yoga. No es yoga con perros; sino un espacio para fortalecer la relación entre el dueño y la mascota a través de masajes, posturas y relajación.
Ellos también necesitan descanso. “Es importante que la mascota tenga su tiempo a solas. Cuando lo desee se va a separar, se irá a su cama, y es fundamental respetarle ese espacio”, comentó Miranda.
La recomendación de los expertos es no cargar a los animales de muchas actividades diarias porque luego podrán echarlas de menos cuando vuelvan a quedarse solos. Es necesario el equilibrio.
La separación posterior podría generar depresiones o ansiedad en los perros; de ahí la importancia de reconocer el lenguaje canino. Ellos demostrarán, con su conducta, si algo está mal. En ocasiones dejan de comer, se muestran agresivos o decaídos y con orejas bajas y colita entre las patas.
Fuentes: Wendy Araya, médica veterinario CMV 2265. (Cel.: 8319-9971); Clínica Veterinaria Novavet, Lomas de Ayarco (novavetcr@gmail.com); Max Miranda, etólogo propietario Pet Mas. (Cel.: 4081-6111).