El último año y medio ha demostrado la importancia de mantener una salud equilibrada, de la conciencia de la medicina preventiva y lo relevante que puede ser el deporte o el ejercicio físico, para evitar muchas complicaciones de salud.
La Dra. Silvia Núñez, médico general de Salud 360, explica que el ejercicio físico aumenta la oxigenación generando aumento del crecimiento celular, por lo que disminuye la necesidad del consumo de medicamentos para enfermedades crónicas. Es decir, atrasa el hecho de una dependencia a un medicamento, además que disminuye el estrés del día a día.
Una buena oxigenación por medio del aumento de la frecuencia cardiaca, aumenta la condición física, da más energía, aumenta el metabolismo y previene enfermedades cardiovasculares y crónicas.
“El ejercicio influye de manera positiva ya que previene patologías físicas, ya que activa el sistema inmunológico y previene enfermedades degenerativas. Además, de generar un equilibrio en las enfermedades mentales y así prevenirlas. Con estar activos podemos evitar dislipidemias (colesterol y triglicéridos altos), cardiopatías, diabetes mellitus tipo dos, dolores musculares y articulares”, mencionó la Dra. Núñez.
¿Cómo empezar a desarrollar hábitos saludables?
- Se puede iniciar con la alimentación, con consumo de agua, frutas y vegetales.
- Iniciar con algún ejercicio que no sea tan intenso, por ejemplo, caminar y poco a poco generar un hábito.
- Se recomienda como mínimo 30 minutos de actividad física al día, tres veces a la semana.
- Realizarse un chequeo general, para valorar la cantidad de hemoglobina, la función de los riñones, defensas y coagulación por medio de un hemograma. Además, es importante realizarse un electrocardiograma antes de dar inicio a cualquier actividad física.
La Dra. Núñez añade que para aquellas personas que superaron la covid-19 y desean regresar a sus actividades físicas, es importante realizarse un chequeo general por su médico tratante, y valorar los órganos más afectados por la covid-19. Los pulmones se pueden valorar por medio de una radiografía de tórax, importante también realizarse un electrocardiograma para estudiar el corazón y los exámenes de laboratorio.