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Este accesorio que fue protagonista en los años 90 regresó y está causando furor entre las jóvenes, un ejemplo son las celebridades como Kendall Jenner o Gigi Hadid.
La versión original es una cinta raso no excesivamente ancha y de color negro que se ajusta fácilmente al cuello. El nombre de esta famosa gargantilla viene de la palabra “choke” que significa ahogar y sus orígenes se remontan a la época de indios, vaqueros, tribus africanas que utilizaban una cinta en el cuello como referencia a las matanzas por ahorcamientos o en la guillotina.
Actualmente, se utilizan como un elemento más dentro de la moda y han surgido nuevas versiones. Si se quiere integrarlo a su inventario de accesorios, es importante que conozca qué tipo de choker es ideal para usted.
Para las mujeres que tienen un cuello corto convienen los diseños sencillos y delgados, mientras que las que tienen un cuello más largo y delgado pueden apostar por versiones más cargadas.
Además puede generar distintos looks según como use el choker, por ejemplo la gargantilla de raso acompañada por una cadena da un aire más rockero.
Otro estilo es el cordón de cuero, que se puede colocar como la gargantilla tradicional o sino con una lanzada dando un efecto más original.
También se puede dar unas vueltas sobre el cuello y colocar algunos colgantes a los extremos y en el centro, generando un aspecto bastante llamativo.
Por supuesto, no se puede dejar de lado los chokers elásticos, con formas geométricas o de flores, los cuales puede usarlos solos para no sobrecargar el cuello.
Gamusa, encaje y gargantillas ceñidas al cuello son los que están más en tendencia y todos ellos pueden ser utilizados en ocasiones formales y casuales.
Atrévase a usar este accesorio, eso sí tomando en cuenta las recomendaciones anteriores y siempre combinado con un escote o cuello bajo.
Fuente: Katherine Durán Wong, productora de moda.
