
El mundo de la moda está rodeado de perfecciones: cuerpos esbeltos, cabellos hermosos y mujeres "completas". No obstante, la modelo y cantante Viktoria Modesta se propuso cambiar estos estereotipos, convertir las prótesis en un accesorio de moda y cambiar la forma en la que la gente ve a los discapacitados.
Modesta es catalogada como la "mujer biónica", debido a que ha logrado construir su carrera como artista pop pese a que le hace falta una de sus piernas.

"Por mucho tiempo, la cultura pop me cerró las puertas como una artista amputada y alternativa. Creo que a la gente siempre le ha costado saber qué pensar o sentir sobre un amputado que no trata de ser un atleta olímpico. En el deporte, sobrepasar la minusvalía te hace un héroe, pero en el pop no hay lugar a estos sentimientos", aseguró en una entrevista con The Guardian.
En su más reciente sencillo "Prototype" la cantante logró más de 300.000 visitas en tan solo dos días. Su vídeo fue presentado en la final de The X Factor, en una de las franjas horarias más costosas de la programación de Reino Unido en Channel 4, un medio que da oportunidad de que nuevos talentos salgan a la luz.
Modesta nació con una malformación en su pierna izquierda. En tan solo seis años se sometió a 13 operaciones no exitosas y en el 2007 optó por la amputación voluntaria de su extremidad.
Las prótesis que Viktoria usa no quieren remplazar a la pierna perdida, más bien todo lo contrario. "Después de un tiempo, me di cuenta que había otras maneras de tratar ese espacio vacío. No quería la típica prótesis. ¿Por qué no hacer algo distinto y ver a la prótesis como una manera de expresar nuestra personalidad?", argumentó a diario estadounidense.
En el vídeo Prototype, luce dos prótesis de Sophie de Oliveira Barata, directora de The Alternative Limb Project.

"Estaba trabajando en una clínica para crear prótesis superrealistas para gente con amputaciones. Eran impresionantes: tenían venas, lunares, pecas... Pero pensé que si yo tuviera una amputación, no querría que la prótesis fuera así. Querría algo inusual que marcara la diferencia. Como no soy una amputada, creí que quizás estaba siendo poco sensible, así que pregunté lo que pensaba gente que realmente tenía alguna amputación", dice la diseñadora a El Confidencial.
"Tres años después de mi amputación voluntaria, me di cuenta de que llevar una prótesis diferente era una oportunidad para convertir mi pierna en una pieza de moda. La primera vez que me puse una prótesis que era visiblemente biónica, me hizo sentir única", dijo Viktoria Modesta a ese mismo medio.