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Con el ansia de evocar sensaciones, sabores y olores que nos recuerden lo nuestro y potenciar la identidad costarricense a través de su gastronomía, 36 restaurantes ofrecerán durante un mes completo más de 160 platillos autóctonos.
Esta iniciativa es parte de un proyecto llamado Costa Rica Food Innovación, que pretende contar una historia a través de la comida y posicionar a Costa Rica como un destino gastronómico ante los ojos del mundo.
Llaman la atención propuestas gastronómicas como yuplón en tapa de miel, helado de chiverre, sorbete de mango y romero, pargo a la talla de Costa Rica, ensalada de tacaco y pipián con queso palmito o ceviche de palmito, mango y ayote.
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Estos son solo algunos de los 160 platillos que tendrán los restaurantes participantes como parte de un menú especial que sus chef incluirán por un mínimo de 30 días.
Los ingredientes que más llaman la atención en las preparaciones de estos 62 puntos de venta son flores de ayote, flores de itabo, chicasquil, pejibaye, tiquisque, frijoles tiernos, tacacos, papaya verde, chiverre, pipián, maíz pujagua, maíz morado, jícaro, guapinol, ñame, cas y naranja agria.
Los restaurantes participantes son:
Hotel Cocorí; restaurante el Sendero, hotel Villa Blanca; restaurante Claro que Sí, hotel Sí Como No; restaurante Rico Tico, hotel Si como no; Costa Rica Beer Factory Inc; Arenas del Mar; Tintos y Blancos Escazú; Tintos y Blancos Terramall; restaurante Antojitos, San Pedro; Marisquería Mar Azul; restaurante Chateau 1525; cafetería Q´Café; Pub 3; restaurante El Tigre Vestido y restaurante Alquimia.
Además, participan restaurante Lukas; restaurante Tres Hermanas; restaurante Shambala, hotel Trópico Latino; restaurante Chancay Antares; restaurante Chancay Escazú; Misky Cafetería; restaurante Poro-poro; restaurante Jürgen's; hotel Boutique Jade&Rest; O'Sullivan Culinary; hotel Aurola Holiday Inn; Kalissy Caribean Restaurante; restaurante Don Rufino; restaurante Don Wang; restaurante El Tucán, hotel Corobici; restaurante y hotel Colinas del Poas; cadena de restaurantes Spoon; restaurante Coto; cafetería y repostería Kaldi; Casa de Doña Lela – San Miguel y Casa de Doña Lela - Curridabat.
Este proyecto es apoyado por la Cámara Costarricense de Restaurantes y Afines (Cacore) y el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) para desarrollar nuestros platos e ingredientes típicos en un producto turístico.
De acuerdo con el gerente general del ICT, Alberto López, Costa Rica se enfrenta cada año a cerca de 140 millones de oportunidades para lograr que cada bocado se convierta en una emoción y en una experiencia única e irrepetible. Según el ICT; 140 millones es el promedio anual de platillos que se sirven a los turistas que visitan al país.
"El destino completo debe bajar por la garganta de cada turista en cada bocado, y luego subir a su cerebro generando las emociones que detonen en una experiencia única, que extasía el alma, la mente y el corazón de cada visitante", concluyó López.
"Estamos haciendo encadenamientos y potenciamos productos subutilizados con una lista elaborada por el MAG, el INBIO y la UCR, con productos nativos y diferenciados; así como de proveedores orgánicos, en transición y sostenibles", comentó Alejandro Madrigal, Director Ejecutivo de CACORE.
