“La habilidad del piloto”.
Eso es lo que, según el director de Aviación Civil, Guillermo Hoppe, evitó una tragedia en un barrio de Pavas donde la mañana de este viernes se precipitó una avioneta que despegó del aeropuerto Tobías Bolaños, tripulada por los argentinos Damián Barreira (piloto) y Cristian Sapun (copiloto), ambos de 23 años.
Tan solo lograron volar dos kilómetros porque, según alegaron, sufrieron una falla en el motor. A las 7:27 a. m., se estrellaron en media calle, 200 metros al este del supermercado Fresh Market, de Pavas, pero para eso, antes lograron esquivar un árbol y cables del tendido eléctrico.
"Es un lugar rodeado de cables de tendido eléctrico, con casas y un centro educativo privado, por lo que vale la pena resaltar la habilidad del piloto, quien aplicó el protocolo de estos casos y encontró un lugar lo más apropiado posible para aterrizar, golpeó un árbol y viró hasta detenerse. La aeronave es liviana, eso hace que vuele más lento y que exista más tiempo para reaccionar”, explicó Hoppe.
El exdiputado Federico Tinoco, con 36 años de vivir en el lugar, manifestó que él auxilió a los pilotos.
“Asistimos a las personas, bajamos sus salveques y conseguimos un extintor en el colegio para rociar la calle y el motor para evitar el fuego. Ellos (los ocupantes de la avioneta) estaban asustados y dijeron que la avioneta no les alzó”, dijo Tinoco.
Guido Fernández, otro vecino, aseguró que Barreira le contó que sobre el cauce del río que está cerca del aeropuerto se quedaron sin potencia, por lo que vio el lote e intentó aterrizar ahí, aunque al final no pudo.
Daniel Cruz, quien se encontraba en el aeropuerto cuando despegó al aeronave, contó que notó que tenían problemas para tomar altura, por lo que al escuchar un camión de Bomberos los siguió.
“Los ocupantes fueron abordados por los bomberos, mientras los vecinos dijeron que solo escucharon el estruendo, no el motor. Lo más importante es que los pilotos están bien", aseveró Cruz.
Volando por América con ‘El halcón rojo’
Los argentinos iniciaron su viaje en Miami, Estados Unidos, el 15 de abril y han hecho varias escalas. Su recorrido lo narran en Facebook, donde su página se llama “Volando América 2019”.
Pasaron por Alabama, Misisipi, Lousiana, Monterrey, El Salvador y el 5 de mayo aterrizaron en el aeropuerto Daniel Oduber, en Liberia.
Luego viajaron a San José, de donde iban a partir el jueves 9 de mayo hacia David, en Panamá. No pudieron por mal tiempo ante lo cual despegaron este viernes en el avión Cessna 150, matrícula estadounidense N6941-G.
La nave, de un solo motor y para dos pasajeros, es modelo 1970 y lo llevaban hacia Argentina para una academia de aviación.
Ellos le llamaban “El halcón rojo”, por sus colores rojo y blanco y hablaban con entusiasmo desde que salieron de Argentina para encontrarse con él en Estados Unidos. De hecho, el 23 de marzo, postearon: “Ya falta menos! , dos días para el reencuentro con la nave en Miami!”.
El 25 de marzo, en el aeropuerto de Buenos Aires, posaron para una foto, juntos, sosteniendo una foto de Argentina. “Y comienza esta aventura!, a punto de embarcar en el vuelo que nos llevara a Miami para emprender este magico viaje”, postearon en Facebook.
El 30 de marzo publicaron fotos aéreas de con la indicación: “Vuelo de prueba por Maimi!” Y así, conforme pasaron los días fueron informando qué hacían.
Viaje de minutos
Una avioneta despegó del aeropuerto Tobías Bolaños y quedó en vía pública en el barrio Geroma 2.
FUENTE: ELABORACIÓN PROPIA Y AVIACIÓN CIVIL. || E.J. / LA NACIÓN.
Informaron problemas a torre de control
Los socorristas que llegaron a Pavas los reportaron estables y, aunque ambos salieron por sus propios medios, los rescatistas los trasladaron al Hospital de Trauma, en La Uruca, para una valoración más detallada.
Francisco Calvo, médico de la unidad de valoración inicial del Hospital, dijo que los dos pacientes se les sometió a exámenes y a las 4 p. m. fueron dados de alta.
Los problemas de la aeronave fueron detectados por la torre de control del aeropuerto Tobías Bolaños poco después del despegue.
Además, los ocupantes comunicaron las dificultades que tenían.
“La torre de control indicó que tuvo problemas para sostenerse en el aire, desde ahí se presentaron dificultades y los pilotos hicieron la comunicación respectiva. Iban dos personas, argentinos, se dirigían a David, Panamá”, agregó el director de Aviación Civil.
Según datos brindados por las autoridades de Argentina, los suramericanos tienen licencias, compraron la aeronave en Estados Unidos y planeaban llevarla a su país para utilizarla en una escuela de aviación local.
Hoppe confirmó que los extranjeros tenían contemplado abandonar Costa Rica el jueves, pero debido a las condiciones meteorológicas lo pospusieron para este viernes.
A 50 metros de donde cayó la avioneta está el Colegio Bilingüe La Sabana, donde hay estudiantes desde kínder hasta secundaria. Ahí fueron suspendidas las lecciones después del accidente.
También, debido a la emergencia, el aeropuerto Tobías Bolaños estuvo cerrado por tres horas, como parte de las medidas preventivas establecidas en el protocolo.
Hoppe explicó que aunque los controladores aéreos están capacitados para reaccionar de manera efectiva ante este tipo de emergencias, se tomó la decisión de relevarlos de su puesto para realizar las entrevistas respectivas para la investigación.
“Hay una parte emocional en el factor humano que se ve afectada, a pesar del entrenamiento, ya que les tocó ver todas las dificultades de la aeronave, por lo que se toma la decisión de relevarlos como medida de seguridad”, manifestó Hoppe.
Otros percances aéreos
Hace apenas dos meses, el 4 de marzo, la suerte y la pericia acompañaron a otros dos pilotos, cuya nave cayó en el cañón del río Virilla.
En ella viajaban el piloto Eladio Salazar Barrionuevo, de 33 años, y el copiloto, Miron Esteban Castro Marín, de 22. Ambos sufrieron lesiones, pero sin comprometer su vida.
Al parecer, el accidente se debió a una falla mecánica.
La aeronave, matrícula TI-AOP, es una Piper PA-34-200T Séneca II, propiedad de la empresa Prestige Wings, que se dirigía a Quepos a recoger turistas.
LEA MÁS: Suerte y pericia evitaron tragedia al desplomarse avioneta en el cañón del Virilla
También el 5 de setiembre del 2017, a escasos metros de donde se registró el accidente de este viernes, una avioneta monomotor matrícula TI-AGM, en la que viajaban seis personas, se desplomó en el cauce del río Torres, en Pavas, San José.
Una costarricense murió cerca del lugar donde ocurrió el accidente, y un estadounidense, nacionalizado tico, pereció en el hospital.
Otras cuatro personas resultaron heridas en esa emergencia.
El accidente se registró minutos después de que la aeronave despegó del aeropuerto Tobías Bolaños con destino a Liberia y Tamarindo, en Guanacaste.
La monomotor Cessna U-206F, que pertenecía a Aerotransporte Arro S. A., quedó en las cercanías del residencial Monte Galán, en Pavas.
LEA MÁS: Dos personas fallecen y otras cuatro resultan heridas al desplomarse avioneta en Pavas
Información actualizada a las 4:23 p. m. con más datos del caso y antecedentes.