EscucharTres días después de que finalizaran las labores de búsqueda del avión accidentado en aguas del Caribe de Costa Rica, la empresa RSG dio a conocer en su página web que los cuerpos encontrados el 22 de octubre pasado, a 28 kilómetros del aeropuerto internacional de Limón, pertenecen a Rainer Schaller y su hijo, de 6 años.
En una breve publicación, la compañía lamentó los hechos una vez más y dijo que lo sucedido los dejó “conmocionados y devastados”. “Hemos recibido la triste noticia de que nuestro fundador Rainer Schaller y su hijo han sido identificados como los fallecidos en el accidente aéreo de Costa Rica”, reza el mensaje divulgado este viernes 4 de noviembre.
Pese a esto, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) indicó a La Nación que de su parte los nombres “todavía no se pueden confirmar”, ya que aún están a la espera de los resultados de los análisis forenses.
Dentro de la aeronave también viajaba la novia de Schaller, Christiane Schikorsky; una niña de 5 años, otro ciudadano alemán y empleado de la empresa, Marcus Kurreck, y el piloto Rolf Lips, cuyos cadáveres no fueron localizados luego de 11 días de búsqueda. “En este difícil momento, nuestras más sentidas condolencias para las familias de todos aquellos que perdieron la vida o continúan desaparecidos en este accidente”, agrega la publicación de RSG, empresa del magnate.
Ellos salieron del aeropuerto internacional de Palenque, en Chiapas, México, a bordo del avión turbohélice Piaggio Avanti P180, que pertenecía al hombre. Su destino final, el pasado 21 de octubre, era la terminal aérea de Limón y, aunque estaba previsto que aterrizaran a las 5:58 p. m., nunca llegaron.
Días atrás, el director general de Aviación Civil, Fernando Naranjo Elizondo, dijo que el piloto no emitió en ningún momento una alerta de mayday y que en los radares no detectaron ninguna anomalía. Además, aunque en el radio de 10 kilómetros alrededor del aeropuerto limonense no había condiciones climáticas adversas al momento del accidente, según el reporte meteorológico que recibieron las autoridades ticas, el medio alemán Bild consignó que la tarde de ese viernes se reportaron inconvenientes que hicieron que la aeronave se desviara hacia el este, empero, todo eso será analizado conforme avance la investigación.
Naranjo dijo que al no tenerse datos de los instrumentos, indicadores del motor y partes del fuselaje, el trabajo investigativo se enfocará ahora en las últimas comunicaciones de Lips con el radar, las imágenes del video del radar, los registros de las condiciones meteorológicas en la zona al momento del accidente y la información que se obtenga sobre mantenimientos de la aeronave, así como el historial del piloto y los parámetros grabados por las autoridades.
Las diligencias están a cargo de la Unidad de Investigación de Accidentes de Costa Rica, en conjunto con los responsables designados por las autoridades de Alemania, quienes estuvieron en territorio nacional poco menos de una semana y confirmaron que en aguas del Caribe solo se recuperaron asientos, así como algunas partes del armazón del aeronave.
De acuerdo con Aviación, una investigación de un accidente aéreo tiene cuatro fases: la recolección de información factual, el análisis, la conclusión de la investigación y un reporte de recomendaciones pertinentes, con el fin de que a futuro se tomen en cuenta algunos consejos de seguridad que prevengan cualquier situación, por lo que en un tiempo podría conocerse el reporte final.
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El pasado 1.° de noviembre, antes de que se concluyeran los trabajos de búsqueda, personal de Guardacostas y de otros cuerpos policiales del Ministerio de Seguridad Pública (MSP) acompañaron a la familia de una las víctimas del percance aéreo al lugar donde se cree que se desplomó la aeronave. Ese día, Jorge Torres Carrillo, ministro de Seguridad, destacó que esperaban que los parientes tuvieran un poco de paz, en medio de la situación que viven.
Aunque la institución no precisó quiénes eran estas personas, La Nación supo que se trata del padre y la abuela de la niña de 5 años, quien era hija de Christiane Schikorsky, producto de una relación que tuvo en el pasado.
Además de los recorridos en aguas del Caribe costarricense, las autoridades mantuvieron una estrecha comunicación con Panamá, para que en caso de que la corriente llevara algún resto al territorio marítimo de ese país, se alertara; no obstante, ahí tampoco se encontró nada.
El Piaggio Avanti P180 había sido adquirido por Schaller en el 2019 para viajar de forma privada a Estados Unidos, con el fin de encargarse de la atención de su cadena de gimnasios Gold’s Gym, que tenía problemas de insolvencia.
Contaba con una velocidad máxima de 732 kilómetros por hora, casi tan rápido como un jet, pero consumía menos combustible gracias a dos motores de turbo de 850 caballos de fuerza cada uno, ubicados atrás de las alas. Según el medio alemán Bild, la cabina estaba diseñada para dos pilotos, pero también podía ser piloteado por uno solo, lo cual es criticado por muchos expertos en aviación, pues las situaciones peligrosas son más difíciles de controlar sin copiloto.
Este avión no contaba con caja negra, pues su instalación no es obligatoria en máquinas con peso inferior a los 5.700 kilogramos. De hecho, la falta de datos de voz y de vuelo hacen casi imposible determinar qué provocó el accidente.
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Información actualizada a las 12:34 p. m. con dato del OIJ.
