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Wildor Forrester Meléndez, el joven que fue atropellado hace dos semanas mientras observaba unos piques en las cercanías del Parque de la Paz, falleció la noche del pasado domingo luego de permanecer internado varios días en el Hospital Calderón Guardia.
El muchacho de 28 años, era amante de la mecánica y tenía una moto que lavaba todos los días y que incluso la trataba como a su ‘bebé' según su padre, Wildor Forrester. “Él cuidaba la moto como a los ojos de él, todos los días la limpiaba, a esa moto le caía una gota de barro y tenía que lavarla toda”, expresó.
Además se desempeñaba como repartidor de pizzas en Alajuelita, precisamente en ese cantón vivía desde hace más de 25 años con sus abuelos maternos; luego de la separación de sus padres desde muy niño. El joven tenía un apartamento sobre la casa de sus abuelos, no obstante, mantenía una relación cercana con sus progenitores.
“El día del accidente yo lo llamé a las 6 de la tarde como acostumbrábamos, y le pregunté ‘¿papi cómo estás?’ y me dijo que estaba bien, luego yo le pregunté si estaba trabajando pero en ese momento él no me quiso decir que lo habían despedido, porque el dueño de la pizzería no tenía como pagarle un salario. A él eso lo puso triste, yo me di cuenta por la abuela que me contó después”, relató su padre.
“Entonces me dijo que sí, que estaba trabajando pero que iba a salir más tarde con unos amigos a darse una vuelta y yo le dije ‘bueno papi pero no salga tarde, vea que la gente anda loca en la calle’ y me dijo que tranquilo, yo le insistí que se quedara en la casa y le dije ‘que Dios me lo bendiga, te amo mucho’ y él me respondió ‘yo también lo amo mucho pa’ y fue la última conversación que tuve con mi hijo”, dijo entre lágrimas.
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Empeoró progresivamente
El 25 de agosto pasado, un vehículo que perdió el control impactó al menos a cuatro personas que observaban competencias ilegales o piques en las cercanías del Parque de la Paz, Paso Ancho, San José; entre los heridos estaba Wildor Forrester, quien permaneció internado casi diez días en el Hospital Calderón Guardia.
Según Wildor Forrester, su padre, el estado de salud del amante de los motores empeoró progresivamente, su pierna izquierda quedó fracturada y le colocaron varios pines, al parecer en la pierna derecha perdió los dedos y algunas capas de piel. “Él estaba vendado de la rodilla para abajo y el doctor me dijo que tenía el hueso expuesto, también tenía un pulmón perforado, una fractura en las costillas”, comentó.
“Los neurólogos hablaron con la mamá y conmigo y nos dijeron que no podían tocarlo porque recibió un golpe muy grande en el cráneo y se le inflamó el cerebro. A él me lo desconectaron de las máquinas para ver si mejoraba(...)”.
“Lo habían sacado de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para ortopedia y poder revisarle los pies a ver qué más se le podía hacer. Según los doctores él tenía prácticamente muerte neurológica y estaba en estado vegetativo; hasta ayer que Dios me lo prestó y falleció entre las 7 y las 9 p. m”, precisó su padre.
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Buscan Justicia
Don Wildor afirmó que luego de darle sepultura al cuerpo de su hijo su interés es buscar justicia y llevar a los Tribunales al sospechoso del asesinato. “Yo necesito ponerle la demanda al carro y a la persona que me lo atropelló e ir a los Tribunales de Goicocechea, pero eso tengo que hablarlo con el abogado”, indicó.
Aunque por el momento no tienen un representante, con ayuda de familiares buscan encontrar un defensor para llevar a juicio esta causa que definen como ‘una muerte culposa por la que debe hacerse justicia’.
Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmaron el deceso Forrester Meléndez y agregaron que continúan las investigaciones del caso en recolección de información de testigos, vídeos, inspecciones y ahora la autopsia del muchacho. “En cuanto se tenga la prueba se presentará un informe ante el Ministerio Público”, explicaron.
Las autoridades aún no identifican a ningún sospechoso o implicado en el crimen; sin embargo, el padre de la víctima afirmó que la abuela del muchacho tiene un papel de la Policía de Tránsito con los datos de quien aparentemente conducía el automotor que golpeó a Forrester. “La abuelita tiene un parte con el nombre del sospechoso, pero yo no me lo sé, no lo recuerdo”, explicó.
En un video que circula en redes sociales, se observó el día del accidente como los conductores de varias motos y vehículos realizaban acrobacias y competencias de velocidad ilegales en ese tramo que comienza en la radial de Loma Linda y desemboca en la carretera de Circunvalación.
En determinado momento, un automóvil oscuro pasa, derrapa y se va contra varias motocicletas que estaban a un lado de la vía. Es ahí donde motociclistas y peatones resultan heridos, cuatro de ellos trasladados a centros médicos y otros que sufrieron golpes leves pero que no ameritaron su movilización a hospitales.
La Policía de Tránsito reconoció que, tras la flexibilización de las medidas restrictivas por la pandemia, los piques volvieron a las calles y son prácticamente semanales en diferentes carreteras del casco metropolitano.
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