Julio Otero es el papá del menor atacado por un cocodrilo en la comunidad de Cuatro Millas, en Matina de Limón, pasadas las 5 p. m. de este domingo. Su esposa, Margini Fernández Flores, y sus cinco hijos tomaban un baño en el río Matina cuando el reptil atacó a Julio, de ocho años.
La señora le contó que ellos estaban junto al cauce, en una parte seca, de arena y, sorpresivamente, sin que antes lo vieran, el animal se lanzó contra el pequeño, y aunque ella intentó liberarlo, no pudo en medio del ataque. Así fue como Julio fue arrastrado hacia una parte profunda.
“Lo más duro para mi esposa fue ver al cocodrilo flotar con el cuerpo de mi hijo”, declaró don Julio Otero a La Nación la noche de este lunes, al contar que su esposa se encuentra muy afectada por lo vivido y la pérdida de su hijo.
“Las autoridades nos dijeron que este martes continúan con la búsqueda. Yo quisiera que por favor las autoridades realmente le pongan interés al asunto, porque es demasiado. Todos vieron cuando el cocodrilo llevaba en su mandíbula a mí niño y nadie hizo nada, la Policía estaba presente y, según mi esposa, no hicieron nada.
“La Policía siempre anda con armas. ¿Por qué no le dispararon a este animal en ese momento? Ya tendríamos el cuerpecito mi hijo; ese mismo día lo hubiéramos tenido, pero ahora lo veo difícil porque ya han pasado muchísimas horas y aún no lo encuentran. Solo encontraron este lunes su ropa”, añadió Otero.
Contó que es normal ver a muchas familias bañándose en ese río y nunca había pasado un accidente como este.
“Mi esposa Margini Fernández Flores, junto a mis otros cuatro hijos, fueron solo a pasear y a desestresarse con unos amigos cercanos, y pasó ese horrible accidente, ya no sabemos qué más hacer. Yo le pido al Señor poder encontrar a mí hijo. Si lo encontramos, tendríamos el consuelo de sepultarlo, pero pasan los días y las autoridades no dan con mi hijo”.
Julio era alumno de tercer grado en Matina y, según su padre, soñaba con ser “un gran ingeniero o un gran médico”. Agregó que al momento del ataque, el niño se encontraba en un punto donde el agua le llegaba debajo de sus rodillas.