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Uno de los cinco fallecidos en el accidente de la avioneta Cessna 206 TI-GER, que se estrelló en los cerros de Escazú, cerca de Pico Blanco, era Jean Franco Segura Prendas, de 28 años. Él se graduó hace tres años en la carrera de Turismo Ecológico en la Universidad de Costa Rica (UCR). Estudió en el recinto de Paraíso de Cartago.
Sus perfiles en redes sociales evidencian su profunda pasión por el turismo y el compromiso con la conservación ambiental. Según consta en su cuenta de LinkedIn, desde sus años como estudiante y posteriormente como profesional, se desempeñó en actividades relacionadas con el sector turístico. Entre el 2019 y el 2020, trabajó como guía en el Jardín Botánico Lankester, un espacio natural propiedad de la UCR dedicado a la conservación, el disfrute y el manejo sostenible de la flora costarricense.
Durante los últimos seis años, Segura también laboró no solo como guía turístico, sino también en roles vinculados con el servicio al cliente. En la actualidad, trabajaba para la empresa Groups & Tours.
La aeronave en la que viajaba junto con cinco personas más partió de Barra del Tortuguero, en Limón, con destino al aeropuerto Juan Santamaría, en Alajuela. Sin embargo, se perdió de los radares alrededor del mediodía.
De acuerdo con lo investigado por este medio, otra de las víctimas, Gabriela Calleja Montealegre, de 64 años, es la directora de la Fundación Horizontes. En este accidente, también perdió la vida Enrique Arturo Castillo, de 56 años, empresario vinculado al sector turístico.
Esta noche, la Cruz Roja Costarricense informó de que solo Paola de los Ángeles Amador Segura, de 31 años y madre de dos niñas, sobrevivió al siniestro. Aunque fue encontrada consciente, su estado de salud es crítico.
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